El Imeplan (Instituto Metropolitano de Planeación), organismo encargado de la planeación en Guadalajara, identifica al menos 30 zonas en el Área Metropolitana de Guadalajara que cuentan con los servicios básicos y que, por tanto, pueden beneficiarse del Proyecto de Vivienda y Regularización, presentado recientemente por la presidenta Claudia Sheinbaum, en el que se prevé la construcción de un millón de viviendas de bajo costo en el país (El Informador (27/10/2024).
El Instituto menciona que estas zonas se muestran en el plano de “zonificación primaria” del POT-met (Plan de Ordenamiento Territorial Metropolitano), ya aprobado por los ayuntamientos metropolitanos. Están en sitios como Huentitán (municipio de Guadalajara), Mesa Colorada (Zapopan); Zalatitán (Tonalá); Lomas de Tejeda (Tlajomulco); Las Canteras (Zapotlanejo) o San José del Castillo (El Salto). 17,000 hectáreas, de las cuales el 65% son ya aptas y las restantes 35%, aún no.
Habrá que confiar en lo que aquí se menciona. Volví a revisar el POT-met. El plano de zonificación primaria, clasifica ahora las nuevas zonas para vivienda como “áreas de crecimiento”, factibles, condicionadas y restringidas. Al estar en el documento, el plano está en una resolución demasiado baja que no permite verlas en detalle; ojalá que pronto aparezca una liga a un plano con una resolución suficiente para poder visualizarlas con claridad.
Revisé en Google Earth una de las zonas mencionadas: Mesa Colorada. Es una zona bordeada por la Barranca del Río Santiago y por las Cañadas de San Isidro. En su extremo norponiente aparecen algunos predios grandes vacíos. Supongo que son esos a los que se refiere el Imeplan como factibles para nueva vivienda, pero habría que corroborarlo. Tampoco son demasiados. Mesa Colorada es una zona extensa y de baja densidad. Podría redensificarse, en forma integral y sustentable, en colaboración con sus pobladores, para crear nueva vivienda, en primera instancia, para beneficio de los familiares de los propios vecinos.
Tampoco debemos limitarnos a pensar que la propuesta presidencial tiene que ser necesariamente en grandes predios no urbanizados. Las zonas ya urbanizadas, los barrios y las colonias, pueden optimizarse y alcanzar densidades eficientes pero mesuradas, consensadas y en beneficio de sus residentes. Lo que, en última instancia, podría incluso mejorar la calidad urbanística y ambiental de estos hábitats esenciales.