En 1995, abogados y activistas opositores a la pena de muerte de Estados Unidos lograron que los inquilinos de los corredores de la muerte crearan sus páginas de internet y así difundir libremente sus ideas y pensamientos.
Uno de los primeros presos en abrazar la iniciativa fue Danny Rolling, en cuyo sitio aparecía él presumiendo sus atributos –“sensible”, “amable”, “romántico”—, para dar paso a los apodos que le dio la prensa: Ennad, Géminis y el más conocido: El Grizzly de Gainesville.
Al llegar a este punto, posiblemente el usuario estaría a punto de apagar su máquina, al reconocer al individuo que mató a cinco estudiantes, decapitando a algunos de ellos, eviscerando a otros.
Para 1996, maravillado por el universo editorial, Rolling, junto con su novia, la groupie de los homicidas reiterativos, Sondra London, publicó The Making Of A Serial Killer: The Real Story Of The Gainesville Murders, una obra exhaustiva en la que el criminal explicaba por qué y cómo asesinó a sus cinco víctimas.
Antes de The Making Of A Serial Killer…, Sondra London escribió el libro Killer Fiction, en coautoría con otro novio, el ex policía G.J. Schaefer, quien fue detenido en 1973 por asesinar oficialmente a dos personas, aunque hay sospechas de que fueron muchos más.
John Wayne Gacy Jr., el empresario que de día se disfrazaba de Pogo el Payaso para actuar en los orfelinatos de Chicago, y que de noche se convertía en un monstruo capaz de matar a 33 jóvenes y adolescentes, también escribió un libro en coautoría con Shane Bugbee: A Question of Doubt (Una cuestión de duda), en el que alega que no todos los homicidios que le adjudicaban los había cometido él.
The Gates of Janus: Serial Killing And Its Analysis (Las puertas de Jano: Asesinato serial y sus análisis) fue escrito de principio a fin por el asesino británico de niños Ian Brady, con la tutoría de Colin Wilson, un autor especialista en temas de criminalidad y misticismo.
The Gates of Janus: Serial Killing And Its Analysis es el homenaje que un asesino serial rinde a otros asesinos seriales, como Ted Bundy (“un monstruo de sonrisa divina”), John Wayne Gacy, Peter Sutcliffe y Richard Ramírez, El Acosador Nocturno, quien vivió “la experiencia de escribir sobre páginas vivas y jadeantes”.
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