Ante la posible desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), ya que, en términos de procesos, esta discusión no está finalizada, pues se requiere la aprobación de los congresos estatales y un proceso adicional para promulgarse como reforma constitucional, vale la pena reflexionar sobre las implicaciones de esta decisión.
En primer lugar, la pérdida de autonomía para garantizar la transparencia y la protección de datos personales.
El INAI, al ser un organismo autónomo e independiente del poder ejecutivo, debía tomar decisiones ajenas a intereses políticos y partidistas.
Con su desaparición, estas funciones serán asumidas por dependencias del gobierno, lo que podría comprometer la imparcialidad en el acceso a la información y la protección de datos personales.
Otro riesgo es el retroceso en el proceso de rendición de cuentas de los entes públicos.
Sin la autonomía, se reduce la capacidad de la ciudadanía y de los periodistas para hacer valer su derecho de acceso a la información, así como la vigilancia de los recursos públicos y el ejercicio del poder.
Al no haber una unidad especializada, surge mucha incertidumbre sobre cómo se realizarán las solicitudes de información y/o otros mecanismos de transparencia proactiva que ya estaban funcionando, tras una lucha constante de la ciudadanía.
El INAI no solo era un organismo garante del derecho de acceso a la información, sino también de la protección de datos personales.
Con la creciente digitalización, se pone en riesgo el tratamiento de los datos personales tanto en el sector público como en el privado. Aún no queda claro cómo se protegerá el derecho a la privacidad de la población.
Finalmente, lo más importante es el impacto en la democracia.
El derecho de acceso a la información y la protección de los datos personales son pilares de un sistema democrático moderno.
Los tratados internacionales en la materia son contundentes al referir que estos mecanismos son fundamentales en un gobierno que busca la igualdad, la justicia social, la paz y la participación ciudadana.