En la década de los 50 se pobló Ciudad Nezahualcóyotl, donde conservo muy buenos amigos, de esos que desafiaron y derrotaron al polvo, la lluvia, las inundaciones, el lodo, la falta de calles con servicios, y muchas carencias más. Venían de abandonar los barrios pobres de Ciudad de México, llegaron de Oaxaca, de Michoacán, de Tlaxcala y de otras partes, con la esperanza de crear su patrimonio familiar, con un terrenito y su casita, aunque fuera de láminas de cartón y piso de tierra. Esos pobres, desamparados por muchos gobiernos, organizaron demandas insatisfechas por los gobiernos federal, estatal y municipal. Pocos, como los gobiernos de Carlos Hank González y de Ignacio Pichardo Pagaza, fueron forjando la superación, como en otras entidades, a las numerosas familias de pobres que antes supuestamente había atendido el PRI.
Para el Estado de México escribimos, invitados por el Diputado Maurilio Hernández con el grupo Parlamentario de Morena en la LX Legislatura, el libro “La deuda con el pueblo mexiquense” para dejar testimonio de como entregó el último gobernador del PRI, Licenciado Alfredo Del Mazo Maza, al Estado de México. Porque sucesos como el que padecen los vecinos de algunas colonias de Chalco, son resultado del abandono, la corrupción, la ineficiencia y la consecuente deuda, que hoy reclaman justamente enojados, a la Maestra Delfina Gómez Álvarez, Gobernadora del Estado.
No lo esperaban y llegó Andrés Manuel López Obrador con su campaña intensa, extensa y creciente, con la consigna “Primero los pobres”, y fue conquistando sin prisa, ni pausa, la popularidad que lo llevó hasta la Presidencia de la República.
Ayer rindió un mensaje, muy sentido por él y el pueblo que lo apoya, más que el último informe presidencial, fue el discurso por la reivindicación de la lucha por las clases populares favorecidas principalmente por los programas sociales y un gobierno anticorrupción. Visión de Estadista que hace historia, como señala el lema de campaña: “juntos haremos historia”. Y la hace y seguirá con la 4ª Transformación que llegó al Estado de México.
Casi termina el Tren México-Toluca, aunque hacía más falta en la Zona Oriente, por ser la más poblada. El Parque Ecológico Lago de Texcoco, donde se construía el Aeropuerto, cuando solamente faltaban más pistas al actual. Y además construyó el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles. Y muchas obras más que no alcanza este espacio para citarlas.
Las políticas gubernamentales y las obras realizadas resonaron en millones de oídos de adultos mayores, de mujeres y de jóvenes, en los hechos, más allá de los discursos, que por cierto también hay que reconocerlo: Presidente que sí se comunicó con la población en las famosas “mañaneras” y sus giras. Se pueden mejorar. Con toda seguridad, pero el rumbo está trazado.