Forjada como la nueva clase política gobernante, en un híbrido como partido político, Morena se han convertido en la principal fuerza electoral.
A una semana de darse a conocer el 30 de octubre el nombre del o la candidata a la gubernatura, los grupos políticos con sus respectivos aspirantes han intensificado sus actividades de promoción.
Por la capacidad de financiera y de organización de estructura partidista, destacan en la recta final los tres principales aspirantes a la gubernatura: Ignacio Mier Velazco, Alejandro Armenta Mier y Julio Huerta Gómez.
Lejos de la cultura de la estructura partidista de izquierda, estos tres políticos han logrado construir su posicionamiento porque lograron trasladar a Morena la estructura corporativa orgánica del PRI, como “anillo al dedo”.
A base de dádivas con los programas sociales han construido una base social, con el mismo esquema salinista exitoso del Programa Solidaridad en el PRI, ahora con la bandera del Programa Bienestar, de la 4T.
Desde el 2016, pero con mayor contundencia en las elecciones presidenciales del 2018, las intermedia del 2021 y las locales para renovar el Congreso local y las alcaldías, se realizó el trasvase de militantes y líderes seccionales del PRI a las filas de Morena.
Pero también ocurre con los financieros de las campañas proselitistas: los principales hombres de negocios del estado que lo mismo estuvieron en el comité de financiamiento de las campañas de Mario Marín Torres y Javier López Zavala a las respectivas gubernaturas, ahora están los “PRImos” Mier.
Y no solo eso, uno de ellos, quien fue cabeza del comité de financiamiento de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, el empresario Pepe Chedraui, es ahora la carta de este sector pudiente para ser ungido como candidato de Morena a la alcaldía poblana.
En esta nueva recomposición de grupos políticos en Morena, la llamada clase gobernante, solo cambian de piel, ahora con la camiseta de Morena, luego de despojarse de las filas como soldados del PRI”, pero son los mismos.
Dicho de otra manera, la presunta izquierda electoral, los fundadores de Morena, fueron rebasados por la derecha con el éxodo de priistas, principalmente del marinismo, que han hecho talco a los minúsculos acríticos grupos de izquierda de Morena, incondicionales de AMLO.
Después de la derrota electoral del 2010 frente al PAN, el PRI en Morena, con la misma clase gobernante poblana, se prepara para el asalto al poder político y económico del estado.