El contexto más relevante para hablar sobre el nuevo gabinete es el de continuidad y evolución de un modelo de economía política que cambió en 2018, cuyos resultados a menos de 6 años fueron ratificados por una mayoría del voto incluso superior a 2018.
No me sorprende por lo tanto que Rogelio Ramírez de la O haya sido ratificado para continuar como secretario de Hacienda, por su manejo de las finanzas del país y asignación de los recursos presupuestales en consistencia con el nuevo modelo, de creación de demanda fortaleciendo el ingreso y el mercado interno, en un ambiente de cuidado en el gasto en relación con los ingresos, que ha gustado a los mercados.
Tampoco me sorprende la ratificación de Ariadna Montiel, con su espíritu hecho de la misma madera de fortalecimiento del ingreso, donde a ella misma la he visto llegar por los medios que sean a entregar a las comunidades sus transferencias sociales. Y ni qué decir del programa “Sembrando Vida”, cuyo éxito se ha convertido en demanda de su continuidad por parte de las comunidades.
Ni me sorprende que Raquel Buenrostro siga siendo aprovechada en su innata búsqueda de justicia en los ingresos que le corresponden al gobierno federal, probada en el éxito de su gestión al frente del SAT.
Rosa Icela Rodríguez ha probado su eficiencia como secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, por lo que hay que seguir aprovechando su expertise desarrollado durante estos cuatro años.
Los demás miembros del gabinete hasta ahora nombrados, para mí representan una búsqueda de mejoría en la gestión de cada cartera asignada, donde Claudia Sheinbaum ha buscado los mejores trayectos curriculares de cada especialidad. Tal vez sorprendería a algunos la designación de Mario Delgado en Educación, pero a mí no. Mario estuvo donde probó ser más efectivo, con los resultados que están a la vista, pero ahora tiene la oportunidad de desarrollarse en su vocación social que siempre ha formado parte de su formación y espíritu.
Las continuidades de regímenes afines entre sí no son novedad en nuestro sistema de asignación de miembros del gabinete. Ejemplos sobresalientes son Francisco Gil Diaz, subsecretario de Ingresos del período del presidente Salinas y secretario de Hacienda de Vicente Fox, entre muchos otros.