Hace unos días cobró revuelo el concepto de Metaverso tras el impulso que le dieron las declaraciones de Mark Zuckeberg (Presidente de Meta) con motivo de los siguientes pasos para la interacción en el entorno virtual. Pero esto no es nuevo, ya que a principios de la década de los noventa Neal Stephenson propuso un espacio virtual colectivo sustentado en la realidad con avatares que, años después, dio pauta a la creación de diversos espacios virtuales en los que las personas han podido interactuar. Hoy dichas realidades virtuales han llegado a otras latitudes al grado de permitir aprovecharlos en aspectos de la vida cotidiana como eventos, visitas guiadas a museos, realizar ejercicios prácticos que en el mundo físico acarrearían elevados riesgos para las personas en campos como la construcción o la ciencia. Pero más aun, en ámbitos como la educación o en una creciente economía digital que permite realizar transacciones reales con criptomonedas. El aprovechamiento de esa realidad virtual seguirá evolucionando, eso es innegable. Y esa inercia tecnológica permite plantear si ya es momento que este tipo de recursos tecnológicos sean aprovechados para mejorar el desempeño de áreas como la justicia.
La justificación para dicho planteamiento radica en que durante los últimos años México ha escuchado diariamente noticas que todo país en vías de desarrollo quiere escuchar. Por ejemplo, que la inseguridad ha disminuido respecto de años anteriores; sin embargo, la realidad ha puesto en su lugar todos esos mensajes. Muestra de ello está en que el INEGI ha reportado que, de todo el universo de delitos cometidos durante 2020, solamente se denunció e inició una carpeta de investigación para el 6.7% (ENVIPE). Que dentro de las razones que tiene la gente para no denunciar, sobresalieron la pérdida de tiempo y la desconfianza a la autoridad con 33.9% y 14.2%, respectivamente. Y se ha estimado que el costo de esos delitos ha ascendido a 277.6 mil millones de pesos durante dicho periodo, el 1.8% del PIB. Además, que el 64.5% de la ciudadanía de 18 años o más ha manifestado que vivir en su ciudad es inseguro (ENSU) ¿Será entonces que realmente ha disminuido la inseguridad?
Pero estos datos tampoco son novedosos. Por varios años se ha hablado de cifras negras y las causas por las que la gente no acude a denunciar delitos para poner a trabajar una estructura operativa que hoy se encarga solo del 6.7% ¿Qué pasaría si se tomara en serio la estrategia digital y se desarrollara un Metaverso para la justicia mexicana que con el respectivo respaldo jurídico y tecnológico, objetivo, sin sesgos ni burocracia o riesgos de corrupción, la ciudadanía tuviera la oportunidad de aprovechar un ambiente virtual para denunciar un delito sin temores ni desconfianzas?
Ricardo Corona*
ricardo.corona@koalsulting.com
* Abogado Especialista en Análisis de Políticas Públicas en materia de justicia y Estado de Derecho