El ave más grande del mundo, pesada, rápida y que vive en manada no vuela, se defiende con sus patas y garras que son poderosas, y su velocidad que es muy alta y veloz, es un ejemplar maravilloso sin duda. ¿Pero qué tiene que ver con las empresas? Existen compañías que se parecen a un avestruz; veamos:
Hoy en día están muy de moda las certificaciones de ciertas normas que van desde la seguridad e higiene, el cuidado al medio ambiente, la inocuidad, la responsabilidad social e integral, el clima laboral y hasta los factores psicosociales, el amibente laboral y ergonómico, y certifique que todo se está haciendo conforme a la ley. ¿Imagínense? Antes estas normas no existan, simplemente porque la mayoría de las empresas hacían y respetaban lo que tenían que hacer; pero todo esto originado por algo comenzó a descomponerse, y las empresas empezaron a no respetar ese “estadio o estatus quo”, como dicen los japoneses, salieron de este núcleo en donde las certificaciones, ¡ no eran necesarias!
Con la evolución del mundo de los negocios y la aparición de la calidad total y otras disciplinas, se provocó que se volviera a tener que las empresas respetaran todo lo que les rodea, y cuidar al máximo a su cliente y a sus proveedores, cuidar la calidad de su producto y/o servicios, obviamente, cuidar que su personal no se accidentara. Increíble, ¿verdad? Elementos dentro de una organización que parecieran lógicos cumplir por su naturaleza, pero que empezamos a desvirtuarlos, y se convirtieron de la noche a la mañana en lujos de exclusividad que solo algunos cumplen, y sobre todo, cuando la “cadena de valor” inició a exigirse estas certificaciones de cliente a proveedor, y así sucesivamente. Las normas son como los avestruces, no pueden enterrar su cabeza para esconder ese cuerpo tan grande que se les ve a distancia, por eso la convicción, actitud y acción de que deben hacer las cosas de manera profesional y legal, respetando y conservando todo lo que las rodé es lo natural. ¿Por qué se tiene que certificar y pagar para hacerlo en una norma? Simple; por la desconfianza. _