La incertidumbre de las encuestas pre-electorales en Estados Unidos

Ciudad de México /
Encuestas electorales y resultado final en el 2020

Uno de los usos de las encuestas pre-electorales es predecir el resultado de las elecciones. Además de prever los resultados, estas encuestas pueden incluso influir en ellos (1) . Sin embargo, la precisión de las encuestas pre-electorales varía bastante. A pesar de avances y métodos nuevos empleados para enfrentar algunos retos enfrentados por la industria encuestadora (el declive de participación, los costos altos), cierto nivel de error es inevitable. Algunas encuestas se acercan al resultado final mientras otras se desvían significativamente. Cuando esto ocurre, encuestadores y académicos intentan entender por qué fallaron los modelos, y muchas casas encuestadoras ajustan sus métodos para mejorar la precisión. Las razones de la imprecisión pueden variar a lo largo del tiempo y entre países, y a veces, la precisión se debe tanto a los métodos utilizados como a factores contextuales. Por ejemplo, la Asociación Americana para la Investigación de Opinión Pública (AAPOR) ofrece una lista de varias decisiones metodológicas (2) que pueden incidir en la precisión de una encuesta pre-electoral. Otras investigaciones (3)  destacan la importancia de factores contextuales como la participación electoral, el cambio entre elecciones, y la compra de votos en la precisión de encuestas. En los Estados Unidos, cabe recordar que un factor que influye en la precisión de las encuestas comparado con otros países es el Colegio Electoral. Aunque las encuestas pueden predecir el resultado del voto popular, esto no se traduce siempre en el resultado final.

El ejemplo más claro de este fenómeno es lo que pasó en las elecciones de 2016. Las encuestas pre-electorales afirmaban la probabilidad de que Hillary Clinton ganara la presidencia con estimaciones que oscilaban entre el 71% y más del 90% (4). La victoria de Donald Trump fue un acontecimiento inesperado para muchos, y sigue habiendo un consenso de que las encuestas fallaron. Sin embargo, resulta que las encuestas nacionales acertaron y figuraban entre las encuestas más precisas desde 1936, pues predecían una ventaja de 3% para Hillary Clinton, quien terminó ganando el voto popular por el 2%. Las encuestas estatales, en cambio, predecían una carrera competitiva e incierta – indicaban que a Trump le faltaba un estado para ganar las elecciones. Aunque Hillary Clinton llevaba la ventaja en los tres estados del llamado “muro azul” (Pensilvania, Michigan y Wisconsin – todos tenían tradición de votar por el candidato demócrata en las 6 elecciones anteriores), terminó ganando Trump en los tres estados. Algunas razones identificadas en el reporte de AAPOR (5) por las cuales era difícil predecir una victoria de Trump fueron el cambio de preferencia electoral en los últimos días antes de la elección, el no revelar la preferencia por Trump (el llamado efecto del “voto tímido por Trump” o “shy Trump effect”), o la falta de ajustar por nivel educativo.

En las elecciones de 2020, las encuestas pre-electorales a nivel nacional estimaron correctamente que Joe Biden ganaría más votos que Donald Trump. Sin embargo, exageraron su apoyo en relación con Donald Trump, y la victoria de Biden en el Colegio Electoral fue más ajustada de lo previsto por muchas encuestas pre-electorales. El error de las encuestas de 2020 fue el más alto en 40 años para el voto popular nacional (6) y el más alto en al menos 20 años para las estimaciones de voto a nivel estatal en las contiendas presidenciales, senatoriales y de gobernador. Entre las encuestas realizadas en las dos últimas semanas antes de las elecciones, el error medio en el margen en cualquier dirección fue de 4.5% para las encuestas de voto popular nacional y de 5.1% para las encuestas presidenciales a nivel estatal. El reporte de AAPOR indica que en 2020, no se identificaron errores similares a los de las elecciones anteriores en 2016. En 2020, el error en las encuestas más bien podría haberse debido a la no respuesta de unidad. Esto se refiere a una posible sobrerrepresentación de demócratas o una subrepresentación de republicanos, así como las diferencias entre los nuevos votantes que respondieron y los que no. Las encuestas pre-electorales no pudieron dar cuenta de los votantes nuevos que participaron en el 2020, y no está claro si los nuevos votantes que respondieron a las encuestas tuvieron actitudes parecidas a los nuevos votantes que no respondieron. Los factores que ayudaron a corregir estos errores en 2016 no funcionaron en 2020. Además, ajustar por la afiliación política y voto retrospectivo del 2016 no ayudó a reducir el error.

En 2024, las encuestas en Estados Unidos ya están en el centro del escenario de las discusiones alrededor de las elecciones del 5 de noviembre. Hasta ahora hemos observado como las encuestas pueden haber incidido (7)en la retirada de Biden, así como en el desarrollo de la carrera actual con la nueva candidata, Kamala Harris. Uno de los agregadores de encuestas más conocidos y difundidos, fivethirtyeight.com (8) , logró predecir los resultados electorales por estado en las elecciones de 2020, aunque subestimó el apoyo de Donald Trump (9). Al final, cada elección tiene sus particularidades contextuales y los retos para los encuestadores en 2024 serán otros que en el 2016 o el 2020. A pesar de las lecciones aprendidas, la única constante en esta elección será la incertidumbre. Y como siempre, no conoceremos la magnitud del error hasta después de las elecciones.

1 The Bandwagon Effect in an Online Voting Experiment With Real Political Organizations, Oxford Academy, 14 junio 2020.

2 A primer on pre-election polls, AAPOR, diciembre 2015.

3 Just a Difficult Election to Poll? How Context Affects Polling Accuracy, SSOAR, 2020.

4 An evaluation of 2016 election polls in the United States, AAPOR.

5 An evaluation of 2016 election polls in the United States, AAPOR.

6 Task Force on 2020 Pre-ElecƟon Polling: An EvaluaƟon of the 2020 General ElecƟon Polls, AAPOR.

7 Amid Doubts About Biden’s Mental Sharpness, Trump Leads Presidential Race, 11 julio 2024, Pew Research Center.

8  3 reasons why racist attacks on Harris could backfire, ABC News.

9 The Polls and the U.S. Presidential Election in 2020… and 2024, Statistics and Public Policy, 30 mayo 2023.


  • Theresa Kernecker
  • Licenciada en Ciencia Política por la Universidad de Nevada, EEUU, y Máster en Estudios Latinoamericanos por la Universidad de Salamanca, España. Obtuvo su doctorado en Ciencia Política por la Universidad de Viena. Su trabajo está publicado en Legislative Studies Quarterly, Party Politics, Política y Gobierno, y Journal of Elections, Public Opinion and Parties.
Más opiniones
MÁS DEL AUTOR

LAS MÁS VISTAS

¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión aquí.

Crea tu cuenta ¡GRATIS! para seguir leyendo

No te cuesta nada, únete al periodismo con carácter.

Hola, todavía no has validado tu correo electrónico

Para continuar leyendo da click en continuar.