Hace siete años y medio surgió el portal hoteleskinky.com, una apuesta de Aidee Iribe y Martín Favela para quitarle lo pecaminoso a la experiencia de visitar un motel de esos que se conocían como “hoteles de paso”, dedicados al placer erótico aunque catalogados como lugares prohibidos y peligrosos.
Iribe, cofundadora de Let’s Kinky, actualmente convertido en un proyecto con numerosos espacios asociados y varias plataformas relacionadas, explica que se han enfocado “en la difusión sana de estos espacios para que la gente los pueda disfrutar sin miedos. Hemos apoyado y contribuido a crear una idea positiva en torno a los ahora llamados ‘hoteles del amor’ a través de contenidos de valor que le ayuden a la gente a disfrutar, gozar y aprovechar todas las atracciones que hay en las habitaciones”.
Así, han ido creciendo paralelamente a estos lugares, que han cambiado su diseño, introducido mobiliario, decoración y opciones para un mayor disfrute. “Los moteles siguen siendo espacios ideales para una sesión muy divertida de pareja o hasta en grupo, muy completa, que te da la oportunidad de disfrutar y conocer numerosas atracciones que te van a hacer disfrutar más y mejor. La nueva estética y la extraordinaria difusión que hemos hecho de ellos ha desmitificado su uso como algo sucio o pecaminoso, viéndolos como espacios dedicados al placer consensuado”.
Con el paso del tiempo, el concepto ha ido creciendo. Comenzaron —y en esta columna lo hemos reseñado— como una página de internet, www.hoteleskinky.com, donde ofrecen una guía que le permite al usuario o la usuaria elegir un recinto por zona, por amenidades, instalaciones, orientación sexual y tipo de prácticas “que ayuda a planear una experiencia muy completa porque tienes una galería fotográfica entera donde aprecias cada habitación, puedes ver los diversos precios, la dirección y lo que necesites para planear una experiencia completa”, explica Aidee.
Después, crearon www.letskinky.com, portal en donde ofrecen artículos y consejos importantes para tener un estilo de vida kinky, es decir, sexy, seductor, hedonista pero bien informado, consciente y libre de tabúes. El año pasado presentaron la aplicación iKinky, donde muestran habitaciones que cumplen con los deseos que cada usuario puede tener, pudiendo combinarlos en base a una celebración, un antojo o una amenidad (silla Curve, rincón del sacrificio, hamaca, jacuzzi, etcétera).
Para este San Valentín vuelven a proponer su actividad “Quítale lo cursi al 14 de febrero”, la cual es “un pretexto ideal para acercar a los usuarios de moteles y a cualquier ser humano a experiencias diferentes. Si antes no tenían en su radar de opciones ir a un motel, ahora lo pueden tener de manera divertida, fácil, para que prueben y celebren en pareja de una manera diferente”, finaliza Iribe.
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No todo San Valentín es cursi
Este año las personas que deseen participar en “Quítale lo cursi al 14 de febrero” podrán elegir un premio diario que incluye una estancia en un love hotel, una cena romántica a ciegas o una carta astral más un kit sensual. Cada día pueden acumular puntos y el que más obtenga ganará la Gran Experiencia, que incluye una habitación con alberca privada más una aventura kinky (salto en paracaídas, comida en Dinner in the sky, en Teotihuacan, o una cena a ciegas) y productos diversos, todo con un valor de 20 mil pesos. “Los juegos diarios les dan la oportunidad a los usuarios de culturizarse sobre temas relevantes del contenido de las plataformas y, de esta forma, dignificar la sexualidad promoviendo un ejercicio sano y cuidado de la misma”, puntualiza Aidee Iribe.
La actividad comienza el 6 de febrero y el 14 se anuncia al máximo ganador de la promoción, aunque ya pueden registrarse para que “hagan lo de siempre, como nunca”.
Las reglas se pueden consultar en el portal www.quitalelocursi.com, donde se informa la dinámica, se puede seleccionar el premio deseado y se contesta diariamente una serie de trivias que incluye un ejercicio de “cierto o falso”, involucra posturas eróticas, juguetes sexuales, canciones, trivias y hasta una propuesta para explorar la creatividad e imaginación de los participantes.
Hay premios diarios. Para ganar uno de ellos es necesario ir acumulando puntos, resolver las rutinas en el menor tiempo posible, tener la suerte de enviar la respuesta en primer lugar y deseos de divertirse. Las dinámicas se pueden llevar a cabo en solitario para sorprender a la pareja o en compañía, para meterle emoción y compañerismo al acto, más allá de si se gana o se pierde. A las ocho de la noche de cada día se anuncia quién se ha hecho acreedor o acreedora del paquete.
Si nunca han ido a un hotel del amor, les recomiendo la experiencia. Infórmense y vayan al que más les guste, olvidándose de lo que antaño se decía sobre estos lugares tan propicios para dar rienda suelta al deseo.
@draverotica
FB: La Doctora Verótika