Los casos por covid-19 en Tamaulipas y México, así como los fallecidos por la temida enfermedad, pone en jaque a las autoridades de salud federal y estatal por no encontrar la luz al final del túnel, a los empresarios y dueños de negocios por el golpe en la economía, como a la sociedad civil en general carente de ingresos y libertad.
Sin embargo, la clase política local y estatal muestra una fortaleza inaudita, una inmunidad envidiable y una valentía admirable. Realizar eventos virtuales o acudir a la entrega de apoyos en colonias sorprende y también contrasta, cuando el mensaje en pleno pico de la contingencia es “quédate en casa”.
Por ejemplo, muy interesante se puso el escenario en Altamira, pues apenas en la interna panista, primera fuerza en la llamada urbe industrial, el secretario de Bienestar Social Alfredo Polanco activó su proyecto desde dicha trinchera para, en un momento dado, ser considerado en la candidatura a la alcaldía.
Vaya situación para el diputado local Miguel Gómez Orta, pues en dichos lares daban por hecho el legislador va “en caballo de hacienda” no solo para la postulación, sino también para ganar, pues Acción Nacional no tiene competencia. Ambos tienen la bendición y el permiso de Ciudad Victoria; ahora vendrá resolver quién tiene mayor arrastre.
Mientras tanto, la pifia de la semana se la llevó Óscar Hernández Zúñiga. Se le ocurrió la brillante idea de armar un grupo en WhatsApp para organizar una “reunión de amigos” con el oficial Mayor de la SEP Héctor Garza, con invitación para priistas, entre ellos el dirigente estatal Edgar Melhem Salinas.
Llegaron entonces las quejas. ¿Cómo convocas a tricolores a una charla con gente de la 4T? Tanto fueron estos señalamientos que el empresario y ex candidato a la alcaldía abandonó la coordinación al fracasar la convocatoria. No quedó fuera la duda: con esta gente de vuelta en el PRI Tamaulipas, ¿tratará de recuperar terreno el siguiente año?
Por lo pronto, en Altamira, Reynosa, Río Bravo y el Congreso de Tamaulipas (sin olvidar Comapa Zona Conurbada), surgen más casos de enfermos por coronavirus entre funcionarios públicos. La escalada de infectados avanza; el puesto público ni siquiera los salva. _