Desde su fundación, el Partido Comunista de China (PCCh) ha dirigido al pueblo chino a luchar en unidad, cambiando fundamentalmente el futuro y el destino de la nación china y provocando cambios trascendentales en su fisonomía. Por lo tanto, se pueden utilizar cuatro palabras para resumir el éxito del PCCh: Pueblo, Teoría, Aprendizaje y Disciplina.
El PCCh siempre ha perseverado en el pensamiento del desarrollo centrado en el pueblo. A lo largo de sus cien años, el PCCh siempre ha considerado la búsqueda de la felicidad para el pueblo chino como su misión fundacional y siempre ha puesto al pueblo en la posición más alta de sus aspiraciones. Durante el período revolucionario, innumerables héroes lucharon valientemente y sacrificaron sus vidas para la independencia nacional y la liberación del pueblo. Después de la fundación de la República Popular China, el PCCh se ha adherido inquebrantablemente a la posición de construir el partido para el público y gobernar el país para el pueblo. En el proceso de gobernar, el PCCh, a través del sistema de la Asamblea Popular y el sistema de democracia consultiva socialista, escucha plenamente las opiniones del pueblo. En la lucha contra covid-19, el PCCh insiste en anteponer el pueblo y su vida, sin dejar desatendido a ningún infectado o paciente. Al mismo tiempo, moviliza ampliamente el pueblo para construir una línea de defensa inquebrantable, reflejando los lazos de uña y carne entre el Partido y las masas populares.
El PCCh siempre se adhiere a que la teoría guíe la práctica. En el mundo no existe una vía o modelo de desarrollo que sea conveniente para todos. Los asuntos de un país deben manejarse de acuerdo con sus propias características y realidades. El PCCh, a la luz de la perspectiva mundial y la metodología del materialismo dialéctico y el materialismo histórico, persevera en buscar la verdad en los hechos, combina la práctica específica de China, las tradiciones históricas, culturales y los requisitos de la época, así como promueve continuamente la innovación teórica y la chinización del marxismo explorando un camino de socialismo con características propias. Especialmente, desde la reforma y apertura, el Partido Comunista de China ha propuesto y establecido un sistema de economía de mercado socialista que ha liberado y desarrollado en gran medida las fuerzas productivas sociales y ha abordado, adecuadamente, la relación entre el gobierno y el mercado, la equidad y la eficiencia, el crecimiento y distribución, etcétera, para que todos los chinos compartan los frutos del desarrollo.
El PCCh siempre ha acumulado experiencia a través del aprendizaje. En la práctica a largo plazo de la revolución, la construcción y la reforma, el Partido Comunista de China se ha dado cuenta, profundamente, de que para llevar al país y a la nación a lograr un gran desarrollo debe otorgar importancia y ser bueno en el aprendizaje. Ya en 1933, el Partido Comunista de China estableció la Escuela Central del Partido. Después de la fundación de la República Popular de China se viene estableciendo y mejorando gradualmente el sistema de formación de cuadros de varios niveles que incluye escuelas del partido, academias administrativas y academias de cuadros tanto de nivel central como regional. Indudablemente, el PCCh ha alcanzado un aprendizaje en el presente y, sin duda, continuará teniendo un fuerte aprendizaje para avanzar hacia el futuro.
También, el PCCh siempre ha priorizado la disciplina. Solo cuando un partido político se gestiona bien a sí mismo puede contar con una gran capacidad organizativa y de liderazgo. Como partido gobernante a largo plazo durante un siglo, el PCCh siempre ha otorgado gran importancia a la construcción de la disciplina. Frente a la corrupción, como problema mundial, el PCCh ha demostrado un gran coraje y ha formulado científicamente una estrategia para combatirla. Específicamente desde el 2012, el PCCh ha insistido en fiscalizar el partido estrictamente de manera integral y avanzar profundamente en su lucha contra la corrupción. Al mismo tiempo, viene mejorando el funcionamiento de los mecanismos de supervisión y restricción y formando gradualmente un mecanismo disciplinario para que nadie ose, intente ni pueda corromperse, con la finalidad de estructurar un ambiente político dentro del partido más claro y un entorno social más saludable.
En suma, el éxito del PCCh no solo continuará ayudando a hacer realidad el anhelo del pueblo chino de una mejor vida, sino también brindará una valiosa experiencia para los partidos políticos de todo el mundo y hará gran contribución para la causa de la paz y el desarrollo de la humanidad. _
* Embajador de China en México
Zhu Qingqiao