Abogados celebraron la apertura de los juzgados de distrito en materia administrativa, ubicados en Boulevard Adolfo Mateos, de la alcaldía Álvaro Obregón, después de dos meses de paro de los trabajadores del Poder Judicial de la Federación (PJF).
Luis Enrique es pasante en un despacho jurídico quien describe los dos últimos meses como una situación ”desesperante” por el cierre de las instalaciones al tratar de presentar desahogos, amparos y otros recursos, por lo cual celebró que terminara el paro al mencionar que así no se retrasarán más procesos.
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¿Qué dijo el pasante?
“Pues un poco desesperante la verdad porque había comunicados que iban a reanudar en tal fecha y no era así”.
“Ya se habían tardado, había rumores de que un abierto parcial, se presentaba todo de manera electrónica y ahorita que ya es de modo físico está perfecto, así no retrasamos más procesos”, explicó en entrevista.
Hasta el momento, los juzgados y Tribunales Colegiados en Materia Administrativa que se encuentran en Boulevard Adolfo Mateos 1950 y 2321, son los únicos con reportes de funcionarios que retomaron sus labores luego de la determinación del Consejo de la Judicatura Federal (CJF).
En dichas instalaciones las actividades se realizan con normalidad y los abogados ingresan en pequeños grupos para realizar sus trámites.
¿Cómo les afectó el paro a los abogados?
Luis detalló que los últimos meses fueron complicados en cuestión laboral para los litigantes y aunque respalda el movimiento de los trabajadores del Poder Judicial, celebró que empiecen a retomar sus labores.
“Yo tenía que presentar un desahogo y pues no se había podido. Había intentado varios medios electrónicos y pues no había recibido respuesta, marqué incluso aquí a los juzgados y me dijeron que estaban abiertos y no fue así. Entonces qué mejor que ya estén abiertos y podamos seguir litigando”.
María José, quien también es abogada, dijo que los litigantes se vieron afectados por los retrasos ocurridos en los casos de sus clientes, y también criticó que la reforma deja de lado la carrera judicial.
“Te afecta porque tus asuntos están parados, no resuelves y no le das al cliente algo a favor, pero así es, no sabemos qué vaya a pasar. Ya están trabajando, es bueno, pero estamos en el limbo. Mi mamá tiene 35 años trabajando, ella no entró por un padrino, o sea sus puestos le costaron y se va a jubilar y también imagínate que corriera riesgo su pensión, todo lo que trabajó”, mencionó.
RM