La alcaldía Iztapalapa condenó la violencia ejercida por un grupo de comerciantes ambulantes que este jueves bloquearon calles a manera de protesta e incluso tomaron la entrada al edificio sede.
Tras el incendio el 1 de enero de 2022 del Mercado La Purísima, en el que varios locales resultaron dañados y algunos puestos instalados en el exterior resultaron afectados, el gobierno de Iztapalapa acordó con los comerciantes que temporalmente se instalarían algunos puestos sobre el arroyo vehicular de la calle Hidalgo, a fin de no afectar su fuente de ingresos y en tanto se hacían las reparaciones dentro del mercado.
Una vez concluidas las reparaciones, los locatarios volvieron a ocupar sus espacios y los comerciantes ambulantes debían regresar a la explanada del mercado y la acera aledaña, tal como se encontraban antes del siniestro. Sin embargo, esto no ocurrió e incluso ampliaron más el área que ocupaban inicialmente sobre el arroyo vehicular. Durante meses se negaron a la reubicación a pesar del acuerdo previo y de reiteradas mesas de diálogo entre esta autoridad y los líderes de los comerciantes.
Hace un par de meses se acordó el retiro de los puestos del arroyo vehicular, y nuevamente la avenida Hidalgo tuvo circulación. Sin embargo, este jueves, el grupo de comerciantes tomó varias vialidades e ingresó de manera violenta al edificio de la sede, hecho que condenamos rotundamente.
La alcaldía rechazó la violencia de un grupo que pretende imponerse a los ciudadanos y vecinos de la demarcación. Por mandato constitucional, la alcaldía tiene la obligación de garantizar que el espacio público sea el lugar para el ejercicio de los derechos de todas y todos.
FMU