El ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Arturo Zaldívar, defendió sus declaraciones sobre la presión ejercida desde el gobierno de Felipe Calderón en el caso de la Guardería ABC y aseguró que hay pruebas de lo que llamó "operación de Estado".
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"Todo lo que yo dije está acreditado: dije que me fue a visitar el secretario de Gobernación y hubo presiones; Fernando Gómez-Mont dio unas entrevistas (hace 10 años) donde dijo que efectivamente tuvimos una discusión, pero que él no sintió que estuviera presionando, muy distinto a lo que declaró hoy", dijo en entrevista con Azucena Uresti para Grupo Fórmula.
"Que la Corte estaba tomada por secretarios de Estado que estaban hasta las 11 de la noche recorriendo pasillos y que algunos de ellos les llevaron documentos a ministros para que leyeran en la sesión, lo puede corroborar cualquier persona que haya trabajado en la Corte en ese momento; yo no estoy mintiendo y ahí están las pruebas", agregó.
Ante los cuestionamientos de por qué realizo estas declaraciones a 12 años del suceso en el que murieron 49 niños, el jurista recordó que la polémica conversación fue retomada por medios de comunicación desde 2012.
"¿Por qué hice ayer esta manifestación? Porque es parte de la cultura constitucional de México; estaba presentando mi libro, que se refiere a los 50 asuntos más paradigmáticos en que me tocó intervenir como ponente y este fue uno de los más importantes y el primero que me tocó de relevancia", explicó.
"¿Por qué no lo dije antes?"
"Cuando sale todo el tema de la Guardería ABC, el entonces presidente de la Corte (Guillermo I. Ortiz Mayagoitia) me pidió no salga a medios y durante un buen número de años yo no dije una sola palabra de la Guardería ABC en ningún medio de comunicación porque es un compromiso que yo asumí para cuidar a la Corte, esa es la razón por la cual en aquellos tiempos no salí a decir lo que hoy estoy diciendo".
Sin embargo, Zaldívar aclaró que no fue una orden de Ortiz Mayagoitia, sino "una solicitud amistosa entre colegas", lo cual es una de las facultades políticas del presidente de la Corte es esa y "yo fui institucional", dijo.
Además, explicó que llamó a la intervención del entonces secretario como "operación de Estado" porque implicó la presencia de secretarios y funcionarios federales en la sede de la SCJN, el manejo mediático y la presión que él vivió y las "amenazas veladas de algunos compañeros que me daban una palmada en la espalda y me decían 'cuidado por donde vas, esto no es así, tú vas llegando".
"Llegué a pensar que pudiera estar en riesgo"
El también presidente del Consejo de la Judicatura Federal negó tener elementos claros para pensar que sería víctima de un ataque, pero por el ambiente en el que se desarrolló el caso, pensó que pudiera estar en riesgo.
"Yo sí llegué a temer que por algún medio no se me permitiera llegar a la sesión y por eso firmé en la noche dos ejemplares del proyecto y le pedí a mi equipo que si a las ocho y media de la mañana no estaba en la Corte, lo bajaran a la secretaría general de Acuerdos y lo hicieran del conocimiento de los medios ".
Además, recordó que fuera de la actual presidenta del Senado, Olga Sánchez Cordero, y un ministro más, fueron los únicos que votaron a favor de su proyecto y recalcó que los demás fueron complacientes con la dirección gubernamental.
DMZ