En los últimos 11 meses, la frontera sur de Estados Unidos ha enfrentado un nuevo adversario que no ha podido detener: el fentanilo. Cinco mil 800 kilos de esta droga han sido asegurados, frente a los 5 mil kilos que fueron asegurados en los 12 meses del año fiscal de 2021, causando medidas desesperadas, como la del gobernador de Texas, Greg Abbott, al declarar a los cárteles mexicanos como organizaciones terroristas.
El fentanilo llega de varias formas: en pastillas, en polvo y hasta en tabiques de pasta; escondido en vehículos, en personas e incluso en empaques de dulce. Una oleada de esta droga, cuyo mercado se disputan los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación. Diariamente, los jefes de las distintas divisiones de la Patrulla Fronteriza estadunidense comparten en sus redes sociales fotografías de aseguramientos de fentanilo.
El mes de agosto también registró una cifra históricamente alta con mil 43 kilos de fentanilo asegurados en la frontera con México. Una cifra, que además, ha ido en aumento desde marzo pasado, a excepción de junio cuando sólo se aseguraron 311 kilos.
- Te recomendamos Fentanilo es 100 veces más potente que la morfina: investigador Ciencia y Salud
En México, los cárteles han logrado evadir todos los controles portuarios para poder importar desde China e India los precursores químicos con los que producen la droga de forma local y luego la trafican hacia Estados Unidos.
Las cifras de agosto también indican que se han registrado menos eventos de aseguramiento de fentanilo, aunque en los que han ocurrido se involucran a mayores cantidades de esta droga.
Agonía de otras drogas frente al imperio del fentanilo
Además, paralelo a este aumento exponencial en el tráfico del fentanilo, es potencialmente letal en dosis relativamente pequeñas. Se está registrando una disminución en el tráfico de otras drogas, como la cocaína y la metanfetamina, que tuvieron una ligera disminución en sus aseguramientos, o en la heroína y la mariguana, que reportaron una fuerte disminución en el número de aseguramientos.
DMZ