La noche del 2 de noviembre, alrededor de 60 personas se reunieron en la colonia Santa Lucía, alcaldía Azcapotzalco, para celebrar a la Santa Muerte. Sin embargo, la celebración religiosa se convirtió en una lluvia de balas tras un ataque directo contra dos hombres y una mujer.
A través de la frecuencia de radio de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México los oficiales Meza y Ramírez recibieron un reporte que indicaba que había personas heridas por disparos de arma de fuego entre las calles en la calle Norte 141 y Camino a Nextengo, por lo que se dirigieron al lugar de la emergencia.
Ahí se encontraron con dos hombres de 21 y 25 años, así como una mujer de 32, quienes fueron atacados a balazos cuando terminaban la celebración. Al recabar testimonios con otros de los asistentes, les indicaron que al lugar llegaron cuatro personas a bordo de un automóvil Vento gris, y una de ellas sacó un arma y les disparó.
"Los lesionados estaban en el altar celebrando a dicha escultura y llegan los otros sujetos y empiezan a hacer detonaciones. Fue (un ataque) directo hacia ellos, no hay más lesionados más que esas personas", dijo a MILENIO la oficial Meza.
Posteriormente, los policías comenzaron el rastreo del vehículo con apoyo del C2 Poniente, logrando ubicar el automóvil entre las calles Renacimiento y San Isidro. Cuando le marcaron el alto, el conductor aceleró y uno de sus acompañantes disparó contra los policías, por lo que iniciaron una persecución.
"El compañero Ramírez y yo al ir circulando sobre las calles Renacimiento y San Isidro logramos ubicar el vehículo con las características proporcionadas al cual le marcamos el alto y ellos empiezan a emprender la huida y hacer detonaciones", añadió la oficial.
En calles aledañas se encontraban los agentes Palomares y Báez, quienes después de ver pasar el vehículo de los agresores y la patrulla de sus compañeros, así como escuchar solicitud de apoyo de sus compañeros por los disparos que estaban haciendo los presuntos responsables, los siguieron para ayudarles en la detención.
"Nosotros venimos circulando sobre Manuel Salazar y llegando ahí al Eje 3 San Isidro, vemos pasar el vehículo y ellos (los otros oficiales) en persecución, por lo que nos dirigimos a apoyarlos. Con el llamado de él (Ramírez) que estaba pidiendo el apoyo por las detonaciones, pues llegamos luego luego al lugar, estábamos cerca", dijo el agente Báez.
La huida de los cuatro delincuentes se vio frustrada por el tráfico que había en la zona, por lo que descendieron de su automóvil para intentar escapar a pie. Sin embargo, los oficiales iban detrás de ellos y al ver que abandonaron su vehículo, bajaron de sus patrullas y cada uno persiguió a uno de los agresores.
"Más adelante estaba un semáforo, en ese momento se encontraba en rojo, desciende el conductor del vehículo Vento, el cual es el primero que corre y el compañero (Báez) es quien lo persigue, posteriormente la compañera persigue otro e inmediatamente nos dirigimos cada quien a uno para hacer la detención correspondiente", agregó el policía Palomares.
En cuestión de segundos los policías le dieron alcance a los hombres entre avenida de las Armas y calzada San Isidro, en la colonia Providencia, donde los individuos aseguraron no haber hecho nada a pesar de que uno de ellos disparó contra los oficiales. El agente Ramírez comentó que la acción para detener a los cuatro hombres duró alrededor de cinco minutos.
"La persecución duró aproximadamente lo que es un minuto, el vehículo iba bastante rápido tratando de escapar. Toda la acción duró como máximo unos cinco minutos en lo que llegamos al cruce donde estaba el semáforo en rojo y en lo que hicimos las persecuciones. Ellos dijeron que no habían hecho nada, que ¿por qué la detención?, les dijimos pues vienes haciendo detonaciones contra nosotros", comentó.
A los detenidos de 25, dos de 26 y 27 años, antes de ser presentados ante el Ministerio Público de la Fiscalía General de Justicia, les decomisaron un arma de fuego corta, un cargador y seis cartuchos útiles.
Sobre las tres víctimas, los dos hombres fueron trasladados a un hospital por sus propios familiares, ya que ambos presentaron impactos de bala en la espalda. Mientras que la mujer herida no quiso ser trasladada a un hospital, por lo que fue atendida por paramédicos de la Cruz Roja Mexicana, quienes la diagnosticaron con dos lesiones por arma de fuego en el antebrazo izquierdo.
Aunque desde el año pasado han destacado diversos hechos violentos registrados en la alcaldía Azcapotzalco, los policías afirman que esto no es una situación actual y que uno de los principales retos es que su demarcación es ser frontera con el Estado de México, lugar a donde los delincuentes constantemente pretenden huir después de cometer un ilícito.
"Ya tiene bastante tiempo, en mi experiencia personal también tuve un evento hace medio año relacionado igual con arma de fuego, pero esta persona que me disparó falleció. Es algo complicado ya esa zona, más por la colindancia con el Estado de México porque los delincuentes cometen el hecho en la Ciudad de México y se van al Estado de México", afirmó el oficial Ramírez.
En tanto, el policía Báez cuenta que los principales casos más frecuentes que atienden en su sector son reportes por disparos de arma de fuego, la presencia de personas armadas, entre otros delitos, los cuales requieren una rápida respuesta para evitar que los delincuentes huyan a la entidad mexiquense.
"Lo que más atendemos son disparos por arma de fuego, personas armadas, drogándose, robo a transporte público y a repartidor. Ya sabemos que corren hacia el estado, lo principal es bloquear las avenidas principales", puntualizó.
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