La activista Alicia Díaz fue hallada muerta tras estar una semana desaparecida en Ensenada, Baja California. La joven de 22 años era conocida por luchar por causas y derechos de la comunidad LGBT.
La madre de Alicia acusó en redes sociales que las autoridades de la Fiscalía General del Estado (FGE) nunca emitieron una pesquisa, pues , dijo, solo generó una orden de localización. Explicó que su reporte está grabado en el número de emergencias 911.
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El miércoles 3 de noviembre, el cuerpo de la joven fue encontrado en el interior de una casa de madera en la colonia Munguía, en el municipio de Ensenada.
"Es un vil crimen de odio, hay mucha saña en este asesinato. Se ensañaron con su rostro", contó un agente investigador.
Hace algunos años, Alicia ayudó a la FGE a esclarecer un par de homicidios y, cuando ocurría algún delito o injusticia con sus compañeras, acudía reportarlo a la autoridad, mencionó de manera anónima un oficial.
"Era una persona inteligente y siempre procuraba la justicia en sus distintos ámbitos", agregó.
Lizette Dueñas, presidenta del Consejo para la Protección de los Derechos de la Diversidad Sexual de Baja California y directora estatal de Diamantina Rosa, consideró que el asesinato “es un claro crimen de odio”.
Asimismo, Regina Cornejo Mazo, subdirectora de Diversidad e Inclusión del XXIV Ayuntamiento de Tijuana, lamentó y condenó el crimen.
“Exigimos que su caso sea considerado un crimen de odio contra nuestra comunidad y se haga justicia", expresó.
De acuerdo con el Observatorio Nacional de Crímenes de Odio contra personas de la comunidad LGBT, se han registrado ocho crímenes de odio contra este sector de la población durante 2021 en Baja California.
Así, el estado es uno de los que registra mayor índice en crímenes de odio contra integrantes de la comunidad LGBT a nivel nacional, según el observatorio.
ROA