Las hermanas Vázquez, que viralizaron un video en el que piden ayuda de las autoridades federales porque aseguran haber sido víctimas de violencia y supuestos tocamientos cuando estaban bajo la tutela de su madre, confirmaron los señalamientos y sostuvieron que tienen temor de regresar a su resguardo.
Entrevistadas por MILENIO en un domicilio del Estado de México, confirmaron la información del video y narraron parte de las agresiones que dijeron sufrieron cuando estuvieron bajo el cuidado de su progenitora tras el divorcio de sus padres en 2014.
Hace unos días fue difundido en redes sociales un video en el que la menor de 16 años de edad hacía un llamado de auxilio al Presidente, la Gobernadora mexiquense y funcionarios encargados de la procuración de justicia por temor a que un juez las regrese a un DIF o bajo la tutela de su madre.
La menor indicó que cuando estaba a su cuidado, uno de sus familiares supuestamente realizó tocamientos en diferentes ocasiones.
“Tenía seis, siete años más o menos en el momento en el cual llegamos a Sonora con ella. Ella empezó con golpes, empezó a tomar, empezó a permitir estos toques por parte de su hermana y cuando nosotros le decíamos ‘es que no me quería acercar a saludarlo’, eran los primeros golpes más feos”.
Las dos menores coincidieron en haber notificado a su madre sobre estas conductas y además de referir que supuesta fue actividad recurrente, agregaron que fue minimizada.
“Cuando le decía a mi mamá ella simplemente se reía también y me decía que no pasaba nada porque era mi tío, llegan estas cosas de los tocamientos y cuando le decimos nos vuelve a decir ‘hay no te preocupes, es porque es tu tío, pero si dices tal, te va a ir mal’”.
Hasta el momento, continúan vigiladas por red de apoyo
Un juez del Poder Judicial del Estado de México (PJEM) ordenó que ambas menores fueran insertadas a las instalaciones del DIF, pero tras 12 días de internamiento, indicaron que podrían ser enviadas con un conocido que pudiera ver por ellas en tanto su situación jurídica es resuelta.
El esquema de “red de apoyo” les permite tener protección y cubrir sus necesidades básicas, sin embargo, las limita a no ver a su padre, con quien buscan quedarse; o a su mares, quien también pelea su custodia.
“Tengo desde el 8 de febrero sin verlo, no lo veo, no puedo hablar con él, no voy a salir, no voy a la escuela, mi única interacción fuera es un centro de convivencias con una mujer con la que no quiero estar y no quiero volver”.
Hasta la noche del lunes, ambas menores continúan bajo la tutela de su red de apoyo.