La investigación del asesinato de cinco personas en un departamento en la colonia Narvarte en julio 2015 fue un “desaseo brutal” sin intención de esclarecer los hechos, con pruebas que se ocultaron a las familias y a los abogados, y con una estrategia pactada entre el gobierno de Miguel Ángel Mancera en la Ciudad de México para beneficiar en la investigación al de Javier Duarte en Veracruz.
Así lo señaló en entrevista con MILENIO, Alberto Arnaut, documentalista de “A plena luz: el caso Narvarte” que se estrenará el próximo 8 de diciembre en Netflix tras una investigación de tres años.
Explicó que en este tiempo de investigación, descubrieron nuevos hallazgos, principalmente, que las autoridades ocultaron evidencias y que la investigación “fue un desastre desde el minuto uno, porque nunca se quiso realmente llegar a la verdad de lo que sucedió”.
Incluso, fue hasta este documental, que los familiares y abogados de las víctimas pudieron conocer los más de 20 tomos de la investigación y videos que evidencian que hubo más implicados de los que realmente se quiso hacer creer, además de un evidente pacto entre los gobiernos de la Ciudad de México y Veracruz.
“Simplemente se dijo ‘ahí se ven en el video tres personas y nosotros tenemos a tres personas detenidas y esto se acabó’. Parecía en los papeles, que eran de partidos distintos el gobierno de Javier Duarte del PRI y Miguel Ángel Mancera del PRD, sin embargo, actuaron de manera, no sé si consensuada, pero al menos el gobierno de Mancera benefició mucho la versión de Javier Duarte en ese momento, no se quiso investigar realmente nunca la línea de Veracruz.
“Lo que sí vemos es que hay una pretensión por parte de las autoridades, en ese momento de Ríos Garza que era el procurador en ese momento en la Ciudad de México por ocultar cualquier cosa que pudiera llevar más arriba la investigación o hablar de una organización mucho más grande que la que nos quisieron presentar”.
Varias líneas de investigación
Explicó que incluso, hay varias líneas de investigación pero ninguna fue investigada, una de ellas, relacionada con el crimen organizado en la Ciudad de México y que implican a una organización mucho más compleja de la que se manejó en la versión oficial.
“Demostramos a través de las llamadas que se trata de una organización e alrededor de 10 personas, 10 números de teléfono que tenemos identificados y que al fiscalía y la Procuraduría no quisieron investigar en ese momento, muchos de esos números ya no se pueden investigar porque las compañías, al momento que los guardan por dos, tres, cinco años, luego los desechan, algunas son de Nextel que ya ni siquiera existen, se prefirieron, creo yo que a propósito”.
El documentalista señaló que los videos que se filtraron a los medios de comunicación ni siquiera forman parte de la carpeta de investigación y en los videos inéditos que el documental mostrará, se exhibe la participación de más personas.
Adelantó que quizá tras esta investigación, las autoridades en las próximas semanas hablen de nuevos detenidos y avances en la indagatoria, y lamentó que no pudieran llegar a la verdad ni a establecer una línea mucho más clara de lo que sucedió, sin embargo, destacó, sí queda exhibido el desaseo de las autoridades.
“Hay una mejor voluntad de la Fiscalía, en el sentido de que facilita el acceso pero no se les ven realmente ganas de resolver la investigación, creemos que en algunos meses quizá nos presentan nuevos detenidos pero creemos que no hay una voluntad de llegar al fondo del asunto, de saber realmente por qué fueron asesinadas estas cinco personas de manera tan brutal, en un departamento de la Narvarte a plena luz del día.
“Lo que pudimos fue hacer un análisis de lo que pasa en las fiscalías en nuestro país, lo que hacen para garantizar la impunidad, estoy totalmente convencido que en la procuraduría de ese entonces durante el gobierno de Miguel Ángel Mancera hubo una coalición muy fuerte entre la procuraduría y los grupos criminales de la Ciudad de México, y hasta la fecha seguramente muchos de esos grupos siguen infiltrados y por eso no se llega al final, porque puede implicar a actuales funcionarios que siguen en la ahora Fiscalía”.