Sus víctimas eran hombres y mujeres de la tercera edad en la zona centro y sur de la Ciudad de México a quienes se les acercaban con el pretexto de venderles joyería, en especial artículos de supuesto oro. Una vez que tenían la atención de la persona, con una pistola la amagaban y secuestraban por casi dos horas para despojarla de sus pertenencias o a veces obligarla a ir con ellos a un cajero automático para sacar el dinero de sus tarjetas.
Los delincuentes fueron identificados por la policía como Estephani y José Cornelio, dos colombianos en la capital del país, quienes engañaban a las personas diciéndoles que por su situación económica no tenían dinero para regresar a su país y por eso vendían oro a bajo precio; sin embargo, engañaban a su víctima incluso afuera de su propia casa, a la que entraban observando que no hubiera nadie y los asaltaban.
Pero en algunas ocasiones, cuando en la vivienda había algún conocido o familiar, la pareja los sometía y amenazaban para llevarlos a diferentes cajeros, plazas o centros comerciales, para utilizar las tarjetas bancarias y extraer el dinero. Posteriormente, regresaban al domicilio y terminaban de llevarse más pertenencias para luego huir en un automóvil.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), a cargo de Omar García Harfuch, tomó conocimiento de los delitos que estos colombianos cometían, por lo que el área de inteligencia de la institución les dio seguimiento hasta detenerlos el 3 de marzo pasado, ya que el 25 de febrero privaron de la libertad a una adulta mayor para llevarla a hacer retiros en cajeros automáticos y posteriormente robar objetos de su domicilio en la alcaldía Coyoacán, según consta en la carpeta de investigación CI-FIDDS/E/UI-2C/D/00214/02-2022.
“La mujer es la que tenía el acercamiento con las personas de la tercera edad, que eran el grupo vulnerable que ellos manejaban. Ella llegaba y les ofrecía joyería, oro para ser específicos, que en realidad era puro metal, luego se acercaba el hombre y era cuando los enganchaban y se los llevaban a sus domicilios, a ésta persona (la última víctima) la llevaron al cajero, le vaciaron la tarjeta y posteriormente se la llevaron a su domicilio en donde le robaron todas sus pertenencias”, contó a MILENIO un agente de la policía con conocimiento del caso.
Al ser vulnerables, las víctimas eran amenazadas diciéndoles “que iban a regresar o que irían sobre su familia y las personas por miedo, no pedían ayuda en ese momento”. Estephani y José Cornelio, de 28 y 53 años respectivamente, también operaban en plena calle y centros comerciales, “en horas pico” para pasar desapercibidos entre mucha gente, escoger a sus víctimas y cometer el secuestro exprés.
Tras un seguimiento del personal del C2 y C5, los delincuentes fueron vistos en la calle Álvaro Obregón, entre Orizaba y Mérida, en la colonia Roma, alcaldía Cuauhtémoc, cuando viajaban en un vehículo Chevrolet Sonic gris, con placas de circulación G37ADV de la Ciudad de México.
Ahí, un equipo de la policía en campo los arrestó en flagrancia al verlos manipulando hierba verde con características propias de la mariguana, la cual intentaron ocultar. Aquel día, los ciudadanos colombianos, “quienes mostraban una actitud nerviosa” quisieron sobornar a los oficiales, pero estos no aceptaron.
Tras una revisión preventiva, los policías les decomisaron 50 bolsitas de plástico anudadas en uno de sus extremos con aparente mariguana y una bolsa de asas con aproximadamente un kilogramo del mismo tipo de hierba seca. También se les aseguraron 39 dosis de una sustancia sólida al tacto parecida cocaína en piedra envueltas en papel negro, y dos bolsas de plástico transparente con cierre hermético que contenían la misma sustancia en piedra al interior.
La pareja fue presentada, junto con los indicios asegurados, ante el Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación del Delito de Secuestro y Extorsión.
Se sabe que José Cornelio cuenta con un ingreso a la prisión de Lancaster, en Estados Unidos, en el año 2009, por el delito de fraude; y en el año 2014, ingresó a la prisión Picota en la ciudad de Bogotá, Colombia, por el delito de homicidio culposo.
La búsqueda de ambos colombianos se realizó en seguimiento a una organización delictiva generadora de violencia y dedicada al narcomenudeo, secuestro exprés, robo a casa habitación y robo en banco en las zonas centro y sur de la ciudad. Para las autoridades, estos delitos cometidos por extranjeros.
“Sí es a menudo, principalmente son personas que vienen de Sudamérica, como colombianos, venezolanos y peruanos, y la forma de actuar es muy parecida”, indicó el agente de la policía.
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