César Duarte Jáquez se hizo de una veintena de propiedades con recursos del erario público durante su gestión como gobernador de Chihuahua (2010 a 2016), según consta en indagatorias de la Fiscalía General de Justicia del estado.
El ex priista adquirió casi 40 mil hectáreas en ranchos, fincas, predios rústicos, terrenos de temporal y pastal, así como agostaderos y hasta huertas nogaleras, ubicados en los municipios de Balleza, Camargo y Parral.
En estas propiedades se encontraron decenas de animales exóticos como bisontes, llamas y jabalíes, incluso cabezas de ganado bovino provenientes de Nueva Zelanda que formaban parte de un programa de apoyo social para el repoblamiento de hato ganadero para pequeños ganaderos del estado.
Para adquirir algunos de estos inmuebles, Duarte Jáquez utilizó prestanombres, tal es el caso del entonces director de Administración de la Secretaría de Hacienda, Carlos Hermosillo Artega.
Como parte de la Operación Justicia para Chihuahua, el gobierno de Javier Corral ha conseguido asegurar, previas órdenes judiciales, todas estas propiedades que solo por el terreno tendrían un valor superior a los 100 millones de pesos.
Los aseguramientos de estos inmuebles comenzaron en septiembre de 2017, cuando se registró el mayor embargo con 10 fincas, cuya extensión total es superior a las 4 mil 700 hectáreas, ubicadas en los municipios de Balleza y Parral.
Pero fue en Camargo, en febrero de 2018, cuando se registró el terreno con mayor extensión; se trata de un rancho de 30 mil hectáreas en el que se encontraban cuatro asentamientos.
bgpa