José Rodrigo Aréchiga Gamboa, el Chino Ántrax, se declaró no culpable ante la Corte Federal de San Diego por el delito de conspiración para distribuir e importar sustancias controladas.
Este viernes, el presunto jefe de seguridad del Cártel de Sinaloa ingresó a la sala esposado de pies y manos, vistiendo el atuendo naranja que utilizan los presos, y se le vio tranquilo mientras escuchaba la comparecencia a través de un traductor electrónico.
El Chino Ántrax tuvo su primera audiencia, 24 horas después de ser extraditado a San Diego, California, luego de que fuera arrestado a finales de diciembre de 2013 en un aeropuerto en Holanda.
Al acusado se le negó el derecho a salir bajo fianza, decisión que se negó a apelar, pese a que el juez magistrado, Mitchell Dembin, le informó que podía hacerlo.
Aréchiga Gamboa es acusado de importación y distribución de cocaína, metanfetaminas y mariguana en la frontera, cargo similar al que enfrenta Serafín Zambada, hijo de Ismael El Mayo Zambada en la misma corte federal.
Su abogado, Frank Rogen no dio declaraciones a la prensa, debido a que recién se le había asignado el caso.
El juez fijó la siguiente audiencia para el 22 de agosto.