La última vez que en México se realizó la Encuesta Nacional de Consumo de Drogas, Alcohol y Tabaco fue en 2017. Desde entonces, las cifras sobre el panorama de usuarios de sustancias psicoactivas en el país se desconocen.
Pese a ello, son las solicitudes de tratamiento contra las adicciones que reciben diversas instancias de la Secretaría de Salud, como por ejemplo los Centros de Integración Juvenil, las que han comenzado a consolidar a la metanfetamina como protagonista del cambio no sólo del consumo de drogas en México sino también en el mercado nacional de estas sustancias.
De acuerdo con un programa de chequeo de sustancias que el Instituto RIA ha impulsado como mecanismo de reducción de riesgos para consumidores, hasta finales de 2024 la metanfetamina se identificó como el principal sustituto o mezclador de otras sustancias como cocaína o MDMA.
Este factor, se vincula con el aumento de consumo que el también llamado cristal o criko ha tenido en los últimos años en México el cual, poco a poco ha comenzado a alertar a las autoridades sanitarias del país.
En julio de 2023 un comunicado de la dependencia señaló que, de acuerdo con datos del Observatorio Mexicano de Salud Mental y Adicciones, México atraviesa una transición epidemiológica en cuanto a la demanda de atención por uso de metanfetaminas, lo que provocó una alta demanda de tratamientos de adicción. Mientras en 2017 el servicio fue solicitado en seis estados, en 2022 fueron 21 entidades las que registraron ingresos al tratamiento.
"Entre esos años, el consumo de anfetaminas, metanfetaminas, éxtasis o estimulantes de uso médico creció 218%. En 2022 fueron las sustancias de mayor demanda de tratamiento, con 46.2% de los casos, seguidos del alcohol (26%) y marihuana o cannabis (13.3%)", reza el informe de la Secretaría de Salud.
El evidente aumento de consumo de metanfetaminas motivó a autoridades sanitarias a señalarlo como un importante problema de salud pública que se ha extendido prácticamente en todo el territorio nacional.
"Las metanfetaminas son estimulantes sintéticos del sistema nervioso que tienen efectos dañinos a la salud en el corto y largo plazo; causan psicosis, complicaciones del corazón y hasta la muerte [...] Por eso es fundamental la perspectiva de prevención y ofrecer orientación a niñas, niños y jóvenes en planteles educativos", señaló el ex secretario de salud, Hugo López Gatell, durante una de las conferencias matutinas del expresidente Andrés Manuel López Obrador.
¿Por qué las personas consumen metanfetaminas?
Información difundida por la Secretaría de Salud en 2023 señala que casi la mitad de las personas consumidoras de metanfetaminas, específicamente el 46%, inició su consumo entre los 18 y 25 años. La dependencia señala que aquellos que han consumido tabaco, alcohol o mariguana tienen más riesgo de recurrir a sustancias psicotrópicas, no obstante, los motivos son mucho más amplios.
En 2024, el Instituto RIA -una organización civil dedicada a la investigación e incidencia en políticas públicas en materia de drogas con una perspectiva de derechos humanos, justicia social y construcción de paz-, publicó una guía técnica para abordar el consumo de cristal en México.
Sus hallazgos no sólo expusieron los distintos tipos de consumo que hay de metanfetaminas y su dinamismo en la sociedad mexicana sino que también identificaron algunos de los casos más comunes de usuarios.
Entre los principales destacó el uso de cristal en contextos de jornadas de trabajo extensas como es el caso, por ejemplo, de sectores de transporte de carga, industria maquiladora y trabajo sexual. De acuerdo con las investigaciones del Instituto RIA, las personas usuarias reconocieron el uso de metanfetamina como estrategia para afrontar las largas horas de trabajo y lidiar con situaciones de riesgo y posibles violencias en su entorno laboral.
El consumo de metanfetaminas por parte de jóvenes o menores de edad también puede ser influenciado por diversos factores sociales, emocionales y ambientales.
"Las edades y motivos de inicio de uso de metanfetamina pueden variar de acuerdo con condiciones sociales de vulnerabilidad y género de las personas jóvenes. En un intento por escapar de las presiones sociales, el estrés académico o los problemas familiares, algunas personas jóvenes pueden recurrir al consumo de metanfetamina como vía para experimentar emociones intensas y aliviar temporalmente sus preocupaciones", expone la Guía Técnica de Trabajo de Campo para el Abordaje de Consumos de Metanfetaminas y Fentanilo en México (2024).
El uso de cristal en mujeres también es atravesado por diversos factores como las condiciones socioeconómicas, las normas de género y las trayectorias individuales. Aunque se ha documentado en diferentes grupos sociodemográficos, algunas investigaciones destacan un consumo significativo entre mujeres que ejercen trabajo sexual y que están constantemente expuestas a violencias físicas y sexuales, empobrecimiento, prácticas sexuales de riesgo, discriminación y revictimización.
Entre los usuarios de esta droga también destacan aquellos que la utilizan para encuentros sexuales con el objetivo de intensificar su experiencia pero también comunidades indígenas de México en donde las injusticias en materia de autonomía, violencia y conservación de los territorios han creado vulnerabilidades en las que el uso de cristal es responsabilizado por ocasionar rupturas en su tejido social.
Múltiples son los factores que influyen en los distintos tipos de consumo que la metanfetamina tiene en México, sin embargo, dicho fenómeno también tiene una variante poco explorada que ha beneficiado las ganancias del crimen organizado: su mezcla con otras drogas.
Metanfetaminas: principal sustituto y mezclador de otras drogas
Ante el latente problema de salud pública que el consumo de metanfetaminas representa para México, existen desde actores gubernamentales y de la sociedad civil algunas políticas, programas y prácticas que buscan minimizar los impactos negativos asociados con el consumo de drogas las cuales, no necesariamente requiere la suspensión del consumo. A este conglomerado de acciones el Instituto RIA lo define como reducción de riesgos y daños.
"Desde América Latina se ha planteado un término más amplio que es reducción de riesgos y daños de espectro. Este espectro completo lo que propone es contemplar que las sustancias psicoactivas y el uso de sustancias psicoactivas no solo tienen riesgos y consecuencias en nuestra salud, sino a niveles mucho más amplios, niveles sociales", compartió Dalel Pérez, responsable del Desarrollo Organizativo del Instituto RIA en entrevista con MILENIO.
En ese sentido, puntualiza, es complicado abordar los usos de sustancias psicoactivas si no hay una vida digna que pueda sostener los cambios porque hay muchas personas en condiciones vulnerables, de habitabilidad del espacio público, de tener muchos trabajos, de condiciones de salud mental que no han sido atendidas de manera adecuada y muchos otros factores estructurales que merecen la atención del órgano encargado que sería el Estado.
Si bien aún son muchos los argumentos que se contraponen a una regulación o legalización de sustancias y plantas psicoactivas, la también socióloga de la Universidad Nacional de Colombia puntualiza que el consumo de drogas es una realidad tanto en México como en Latinoamérica que debe atenderse desde distintos ejes.
Si bien implementar políticas o prácticas que contemplen cada una de dichas vertientes es difícil, el Instituto RIA cuenta con el programa Checa Tu Sustancia, el cual consiste en ofrecer a consumidores de sustancias sintéticas -ya sea polvos, cristal, pastillas o papeles- la oportunidad de conocer realmente su contenido a través de un análisis químico colorimétrico para confirmar o descartar la presencia de adulterantes y sustitutos que se han identificado en el mercado.
Durante el último semestre de 2024, los trabajos que dicho programa del Instituto RIA realizó arrojaron a la metanfetamina como el principal sustituto o mezclador de las muestras de cocaína y MDMA analizadas. En algunos casos las sustancias estaban combinadas y en otros fueron totalmente sustituidas.
En junio de 2024, de 27 muestras de cocaína que fueron analizadas por el Instituto RIA, 19 contenían metanfetamina, una fue completamente sustituida y solo en 7 se confirmó la presencia del también llamado "perico". Entre septiembre y octubre del mismo año se volvió a identificar cristal en 2 de las 7 muestras de cocaína intervenidas y, finalmente, entre noviembre y diciembre del pasado año 11 de 30 muestras de cocaína volvieron a dar positivo a metanfetaminas.
El MDMA -conocido más popularmente como tachas, molly o éxtasis- es una droga perteneciente a la familia de las anfetaminas que, aunque tiene efectos estimulantes como las metanfetaminas, no son lo mismo. Sin embargo, es esa similitud en las sensaciones que provocan lo que ha facilitado la combinación de ambas sustancias.
El Instituto RIA analizó 33 muestras MMDA en junio de 2024 y encontró que 8 de ellas estaban mezcladas, 2 con cocaína y 6 con cristal. Del total de muestras 6 fueron completamente sustituidas por metanfetaminas. La dinámica fue similar en las 15 muestras de MDMA intervenidas entre septiembre y octubre pues, 5 de ellas fueron totalmente sustituidas por metanfetaminas y dos más fueron combinadas con cocaína y cristal.
Los últimos dos meses del 2024, el Instituto RIA confirmó la presencia de MDMA en 29 de 53 muestras analizadas, no obstante, del resto 15 fueron mezcladas con cocaína y cristal y 9 fueron completamente sustituidas por metanfetaminas.
"Es bastante probable encontrar sustancias como metanfetamina ¿por qué? porque sus efectos también son estimulantes, porque la metanfetamina es muchísimo más económica de producir y esto pues muchas veces las personas usuarias no notan la diferencia dependiendo de la dosis, dependiendo de qué tanto lo contenga y, pues, puede maximizar las ganancias de quienes se están comercializando eh las sustancias. Por ese lado, digamos que ese patrón ya se ha encontrado en lo que nosotras hemos analizado", explicó a MILENIO Dalel Pérez, quien también es la coordinadora del servicio de análisis de sustancias del Instituto RIA.
El bajo costo de la producción de la metanfetamina y sus efectos similares al de otras drogas como la cocaína han hecho que el crimen organizado, responsable de la producción y distribución de dichas sustancias, opte por la combinación de ambas sustancias para aumentar sus ganancias, una consecuencia que, de acuerdo con Dalel Pérez, deriva de la falta de regulación del mercado.
"Como no hay una regulación y este es un mercado, los mercados bajo el capitalismo funcionan buscando la ganancia máxima a cualquier costo, pues necesariamente se van a encontrar formas de maximizar esas ganancias y en este momento esa estrategia está siendo a través de cortes en las sustancias [...] Para que haya un mayor volumen, va con un menor costo de producción y pues las personas usuarias están pagando lo mismo o más", abundó Dalel Pérez.
Mientras grupos del crimen organizado continúan inflando sus ganancias, los usuarios se enfrentan al riesgo de padecer las consecuencias adversas que la combinación de sustancias tiene para su salud toda vez que no sólo se potencializan los efectos positivos sino también los negativos de cada una de las drogas que se mezclan.
El uso de drogas existe y, pese a que desde instituciones gubernamentales se apuesta más políticas de prevención o rehabilitación, existen organizaciones civiles como el Instituto RIA que no sólo abogan por una regularización o legalización de sustancias psicoactivas sino que también impulsan políticas de reducción de riesgos para aquellas personas que ya iniciaron su consumo.
ATJ