Sandra Anayeli Hernández Cruz, cocinera en los comedores del personal del Metro de la Ciudad de México, salió de su casa el 12 de abril pasado en la colonia Parque Metropolitano, alcaldía Gustavo A. Madero para dirigirse a su trabajo, en la estación Indios Verdes. Aquel día abordó un vocho rotulado como taxi que la dejó en el paradero de camiones y desde entonces está desaparecida.
Yazmín, su hermana, contó que Sandra salió de la casa cerca de las 13:00 horas para llegar a su trabajo en el cual su hora de entrada era a las 14:00 horas. Una cámara del C5 en la esquina de su calle pudo haberla captado, no obstante no sirve, pero un vecino tenía una cámara que grabó a la mujer y se le vio abordando un taxi, del cual bajó y cruzó una calle para tomar un camión de la Ruta 18, que va de Indios Verdes a La Villa, pero ya no se supo dónde bajó.
“Nos comunicamos con sus amigos y conocidos, y con personas que pensamos con las que podría estar pero cuando nos dijeron que no, nos comunicamos a Locatel, paramos una patrulla y ellos dieron aviso a policías de la zona de Cuautepec y nos dijeron que no habían visto nada. De ahí nos fuimos a la Fiscalía y se levantó el reporte”, contó a MILENIO.
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Su familia refiere que en la búsqueda de la mujer de 36 años se han encontrado con algunos obstáculos en la investigación para saber dónde podría estar Sandra Anayeli, ya que desde el momento en que reportaron su ausencia, en la Fiscalía General de Justicia les pidieron que ellos investigaran por su cuenta.
“La Fiscalía al principio nos dijo que investigáramos por nuestra cuenta, esa fue la respuesta. Que nosotros podíamos ir al trabajo de mi hermana, preguntar si a lo mejor no se llevaba bien con alguien, si tenía problemas con alguien o le debe dinero a alguien. Que si teníamos algún sospechoso podíamos ir a preguntar a la casa de esa persona y preguntarle si ha visto a mi hermana; cosas que no tienen lógica porque al final de cuentas es su trabajo”, comentó Yazmín.
El 13 de abril, recuerda, fueron a ver más cámaras del C5 para conocer la posible ruta que habría seguido Sandra Anayeli, “pero cómo no salió nada, muchas no sirven, otras no se ven y algunas que pertenecen al gobierno, nos negaron el acceso a esas cámaras”, comentó la hermana.
“Nos dijeron (en la Fiscalía) ‘pues lo que pueden hacer es pedir cámaras de negocios’. Lo hacemos y vemos que mi hermana se sube al vocho. El jueves volvimos a ver cámaras del C5, pero igual muchas no sirven, no se ven, otras nos niegan el acceso e igual nos vuelven a decir que sigamos viendo nosotros y si vemos algo sospechoso o vemos a mi hermana, ya podemos regresar a ver las cámaras de C5, que es lo único con lo que nos podían ayudar, así tal cual no lo dijeron”.
Al pedir acceso a más videos de negocios, las personas de éstas les negaron verlos, por lo que consideraron que tal vez con un permiso de la Fiscalía o alguna autoridad ministerial, podrían consultar tales videograbaciones; sin embargo, al pedir el apoyo a la institución, dijo Yazmín, “no demostraron interés en el caso”.
“Nos dijeron que nosotros investigáramos, que nosotros fuéramos a su trabajo, que resolviéramos todo nosotros y nada más le lleváramos a mi hermana yo creo que ya esperaban que muerta o algo así”.
Las autoridades tomaron el caso hasta que éste fue denunciado por la familia de Sandra Anayeli en la marcha de colectivos de mujeres del Monumento a la Revolución hacia la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, el domingo pasado para exigir acciones para detener los casos de feminicidios y desparecidas.
“Solamente por eso nos citaron el lunes, al día siguiente, para que fuéramos a la Fiscalía y que según nos habían asignado un agente y todo eso. Si no es por la marcha no hacen nada (…) se supone que ya interrogaron a las personas que convivían con mi hermana, que según fueron a ver a las personas de las cámaras que nos las habían negado. Se supone que hicieron todo eso, rastrear el número de mi hermana. Al principio no nos recomendaron hacer eso de rastrear el número porque iba a tardar mucho tiempo y ahorita se supone que ya lo están haciendo. Hasta ahorita no nos han vuelto a hablar para ver sus resultados y que nos digan si ya vieron algo, no nos han dicho nada de eso.
“Nos presentaron a la ministerio público y a un agente. Antes ya habíamos hablado con la ministerio público y siento que ella por ser mujer, que también está viviendo toda esta situación de acoso y violencia hacia la mujer, debería de comprender más casos y ella lo único que nos dijo fue que a lo mejor (Sandra Anayeli) se fue con alguien o que ya va aparecer y lo único que nos recomendó fue seguir pegando los volantes de mi hermana, esa fue su respuesta”, dijo.
Ulises Lara, vocero de la Fiscalía capitalina, informó el 28 de abril que en este caso “se realizó rastreó institucional, así como solicitudes de información a diversas instancias y terminales de autobuses”.
“De igual manera se han realizado entrevistas con familiares directos y se dio intervención a la Policía de Investigación a efecto de que se continúe con la búsqueda a través de recorridos y búsqueda de campo”, comentó en conferencia de prensa.
La ficha de búsqueda AYO/1184/2022 elaborada por la Fiscalía, señala que Sandra Anayeli Hernández Cruz mide 1.54 metros, es de complexión robusta, tez morena clara, cara y nariz afiladas, frente mediana, labios delgados, boca pequeña, mentón regular, cejas semipobladas, ojos medianos café, cabello quebrado negro, y como señas particulares tiene tatuada una rosa y las letras a, s, b en el antebrazo izquierdo. Traía pantalón de vestir, tenis, mochila y una blusa negra.
FS