Corporaciones policiacas mantienen un operativo de seguridad en la región de Tula, mediante patrullajes, tras la fuga de nueve reos del Centro de Readaptación Social (Cereso), de los cuales ya fueron recapturados tres.
A través de recorridos de presencia por diversos municipios, los elementos de seguridad continúan en la búsqueda de las seis personas que huyeron tras la irrupción armada al centro penitenciario, entre ellas J.A.M.M., quien según ha trascendido, la mañana del pasado miércoles tendría su primer audiencia por el proceso que se le sigue.
En dichos operativos, de acuerdo a las fuentes de seguridad, participan por lo menos un centenar de policías estatales intermitentemente, además de elementos de Guardia Nacional, Ejército mexicano y policías municipales de diversas corporaciones de la región.
Por su parte los agentes de la Policía de Investigación, dependiente de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH) continúan con las diligencias e indagatorias con las personas que se han asegurado por su probable participación para la evasión de los reos.
Por ello continúan los cateos y diversas acciones coordinadas para recabar más indicios sobre el caso, a fin de acelerar la localización de las personas prófugas.
La coordinación se extiende además a entidades cercanas, las cuales también colaboran en la búsqueda, tal es el caso del Estado de México, en donde policías estatales interceptaron al conductor de una de las unidades que presuntamente participaron en el operativo de liberación de reos.
Al sujeto le confiscaron siete teléfonos celulares que presuntamente se encontraban al interior de la unidad al momento del aseguramiento; el hombre fue detenido y puesto a disposición de las autoridades correspondientes para que se definiera su situación jurídica por su presunta relación en hechos posiblemente constitutivos de delito.
Falsa alarma moviliza a policías
Durante la madrugada policías se trasladaron a la cercanía de la refinería Miguel Hidalgo, de Petróleos Mexicanos (Pemex), en donde se había reportado un vehículo sospechoso, con una bolsa negra en su interior, para indagar si representaba una amenaza, en el marco de los recientes hechos.
No obstante, al inspeccionarlo se percataron que era falsa alarma, pues la unidad sólo contenía una bolsa con basura, por lo que luego de descartar algún riesgo se retiraron del lugar para continuar con las labores de vigilancia en la demarcación.