Durante el mes de junio, la manufactura de Nuevo León registró una leve desaceleración en algunos de sus indicadores, según información de Caintra Nuevo León.
En su reporte de expectativas económicas, el organismo empresarial detalló que durante el primer semestre del año la manufactura mantuvo su nivel de producción en fase de expansión; sin embargo, en el sexto mes sí tuvo algunos retrocesos en el ritmo de su sindicadores.
Caintra Nuevo León informó que el indicador de volumen físico en producción se redujo de 55.34 a 51.27 de mayo a junio, aunque todavía se mantiene en expansión, la caída refleja un menor número de empresas que reportan crecimiento. Esta pérdida se debe al comportamiento a la baja de exportaciones y demanda interna, explicó Caintra.
Aunado a esto, el índice de exportaciones cambió a fase de contracción, y los nuevos pedidos realizados a las empresas también perdieron terreno, argumentó el organismo; perdió cinco puntos porcentuales en este indicador, llegando a 50.68, muy cerca del umbral de expansión o contracción.
"Con ello, la capacidad utilizada de las empresas y el número de trabajadores con los que cuenta el sector se movieron en el mismo sentido, desacelerando a 51.78 y 50.53 puntos respectivamente en el mes", aseguró el organismo en el documento.
Esta misma desaceleración impactó a la inversión de las empresas (aunque en una proporción menor); el 30 por ciento de los industriales entrevistados señaló haber invertido durante junio. Aunque cabe señalar que esta cifra es mayor que la que se tuvo al arrancar el 2018.
Caintra Nuevo León consideró que este desempeño de la manufactura regia durante el sexto mes del año es resultado de una variedad de factores que incidieron en la certidumbre y operaciones de las empresas; el primero incluido por primera vez en la encuesta es el panorama político.
"Las elecciones presidenciales generaron un alto grado de incertidumbre que incidió sobre las expectativas, así lo reflejaron el 47.6 por ciento de los empresarios", argumentó.
Y en segundo lugar, se encuentra la volatilidad del tipo de cambio, que impactó al 40 por ciento de los industriales sondeados. La falta de certeza de las reglas comerciales hacia adelante y los conflictos entre diversas potencial del mundo continuaron mermando la cotización del peso.
Estos dos temas, insistió la cámara, pueden detener por momentos el avance de la industria, aunque se espera que para los siguientes meses se definan las políticas en México y el ambiente económico internacional.