Eduardo "N", El Chori, líder de La Unión Tepito, es trasladado al reclusorio Norte, con un fuerte operativo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, para quedar a disposición de un juez de control.
El cabecilla criminal quien era uno de los delincuentes más buscados en la Ciudad de México, salió después de las 16:00 horas de la Fiscalía de Investigación de Asuntos Relevantes, en la alcaldía Azcapotzalco, a bordo de un vehículo blindado.
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Diversas unidades de la policía de la Ciudad de México escoltaron a un vehículo tipo rino en el que trasladaban a El Chori, quien se prevé que en las próximas horas sea imputado por la Fiscalía General de Justicia (FGJ).
El hombre tiene una orden de aprehensión librada en su contra por el delito de homicidio calificado.
Ayer, el jefe de la policía capitalina, Pablo Vázquez, informó que la captura de Ramírez Tiburcio se realizó tras un seguimiento que se le dio desde el mes de febrero a lo largo de siete alcaldías del municipio de Nezahualcóyotl, Estado de México.
“Desde el mes de febrero se comenzó a dar seguimiento por medio de cámaras de seguridad a una camioneta blanca que era utilizada por Eduardo “N” y una mujer, en las alcaldías Iztacalco, Miguel Hidalgo, Álvaro Obregón, Iztapalapa, Venustiano Carranza, Gustavo A. Madero y Azcapotzalco, así como en el municipio de Naucalpan de Juárez, en el Estado de México”, dijo.
Así fue su traslado
El Chori llega al reclusorio Norte
Poco después de las 17:00 horas, llegó en un vehículo blindado al reclusorio Norte, ubicado sobre la calle Jaime Nuno en el número 155 en la colonia Guadalupe Chalma en la alcaldía Gustavo A. Madero.
¿Cómo fue detenido?
El Chori fue detenido alrededor de las 19:30 horas del lunes en la colonia Héroes de Padierna en la alcaldía Tlalpan, junto a su pareja sentimental.
Durante el operativo le decomisaron un arma de fuego, dosis de metanfetamina y cocaína en polvo, así como dinero en efectivo.
Detención del líder de 'La Unión Tepito'
¿Quién es El Chori?
El Chori, supuestamente, es el líder de La Unión Tepito, organización criminal relacionada con actividades delictivas, principalmente en la zona centro de la ciudad, como la venta y distribución de drogas, extorsiones, secuestros y homicidios.
Fue rastreado durante años por las autoridades de la Ciudad de México, quienes durante la presente administración lograron la captura de diversos operadores e integrantes de la célula que dirigía, así como miembros de su familia, como su padre Alberto “N”, El General Borja capturado en septiembre de 2022.
Las investigaciones de las autoridades de la Ciudad de México colocan a El Chori como uno de los principales líderes de dicha organización criminal por el que la Fiscalía General de Justicia (FGJ) capitalina ofrecía una recompensa de cinco millones de pesos a cambio de información que ayudara a capturarlo.
Relación con 'La Barbie'
Como muchos criminales de alto kilataje, El Chori tiene su propia leyenda: cuentan en Tepito que antes del 2010 era un narcomenudista conocido en la colonia Morelos, pero sin poder propio. En el crimen local brillaba, en realidad, por su cercanía con la familia Camarillo, cuyo patriarca Fidel Camarillo, El Papirrín, era conocido y temido en los años noventa por ser el zar de las drogas en el Barrio Bravo.
El Chori buscaba una oportunidad para crecer por sí mismo en el crimen organizado y la encontró en la primavera de ese año gracias a Édgar Valdez Villarreal, La Barbie, un antiguo miembro del Cártel de Sinaloa que en 2009 se había librado del dominio de su jefe, Arturo Beltrán Leyva, tras su abatimiento en Cuernavaca, Morelos, a manos de marinos mexicanos.
La Barbie quería hacer un movimiento osado: asentar su imperio criminal en la Ciudad de México desde el centro de la capital. No tenía lealtad a nadie, sólo a sí mismo y a su ambición: convertir a Tepito en su bastión, como Joaquín El Chapo Guzmán lo había hecho con Culiacán.
La historia que narran policías, narcotraficantes, fiscales y periodistas es que La Barbie convocó en mayo de 2010 a los más importantes criminales locales en una vecindad en la calle Hojalatería, casi esquina con Mineros, para proponerles formar un solo grupo criminal que, a cambio de su lealtad y verticalidad, recibiría mejores precios para la reventa de droga además de protección federal.
Junto a él estaba un ex policía judicial federal de Nuevo Laredo, Tamaulipas, conocido como El Moco, quien actuaría como intermediario entre el texano Édgar Valdez y los tepiteños.
Tras siete horas de negociaciones, La Unión Tepito nació con menos de 20 fundadores que en el futuro ensangrentarían a la ciudad, como Francisco Javier Hernández Gómez, El Pancho Cayagua, y un joven Eduardo “N” que desde los pisos medios del nuevo organigrama se preparaba para convertirse en uno de los hombres más buscados del país.
RM