Una jueza federal dejó sin efecto la orden de aprehensión contra Gilda Susana Lozoya Austin, hermana del ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya, por el caso de la planta chatarra de Agronitrogenados.
En acato a una sentencia de amparo, la jueza de control del Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte señaló que el 13 de octubre de este año quedó sin efecto el mandamiento judicial librado el pasado 4 de abril.
El acuerdo no precisa si la juzgadora se volvió a pronunciar respecto a la petición de captura realizada por la Fiscalía General de la República (FGR), la cual señaló a Gilda Susana por su presunta responsabilidad en el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, por adquirir un bien inmueble dentro de territorio nacional, con conocimiento de que los recursos utilizados proceden de una actividad ilícita.
En septiembre pasado, el Tercer Tribunal Colegiado en Materia Penal resolvió que José Artemio Zúñiga Mendoza, entonces juez de control del mencionado centro de justicia, no dio cumplimiento a la sentencia de amparo que se le concedió a la hermana del ex funcionario, en la cual se ordenó fundar y motivar, y resolver si la FGR justificó la necesidad de cautela para el libramiento de la orden de captura.
Los magistrados revocaron la resolución de la jueza Octavo de Distrito en Materia Penal, Luz María Ortega Tlapa, quien había dado por cumplida la sentencia de amparo. El Tribunal ordenó al juzgado de control dejar sin efecto la orden de aprehensión y, con plenitud de jurisdicción dictar una nueva resolución.
- Te recomendamos Difieren audiencia de Emilio Lozoya por caso Odebrecht Policía
El magistrado Miguel Ángel Medécigo Rodríguez indicó que Zúñiga Mendoza “acató” con lo ordenado al dejar sin efecto el mandamiento de captura, pero, incurrió en los mismos vicios al emitir la nueva resolución, ya que invocó argumentos que no se desprendían del escrito de petición de la orden de aprehensión.
Asimismo, agregó que la FGR no satisfizo a plenitud con la carga argumentativa de convencer al órgano jurisdiccional de la necesidad de la medida restrictiva de libertad, así como la ineficacia del citatorio y la orden de comparecencia.
La FGR investigó a Gilda Susana porque presuntamente de junio a noviembre de 2012, se transfirieron 3 millones de dólares de la empresa Altos Hornos de México (AHMSA) a una cuenta de la que ella es beneficiaria, sin que se identificara el origen de la transferencia.
El Ministerio Público aseguró que los 3 millones de dólares, que equivalían en esa época a 34 millones 234 mil pesos, fueron utilizados para la supuesta compra de una residencia en la colonia Lomas de Bezares. El inmueble era propiedad de María del Carmen Ampudia Cárdenas, el cual compró Emilio Lozoya.
ir