El dueño de un taller mecánico y su hijo fueron asaltados afuera de su negocio por dos desconocidos, quienes los despojaron de 110 mil pesos en efectivo que acababan de retirar de una sucursal bancaria.
Los afectados se disponían a descender de su automóvil cuando fueron encañonados con armas cortas por el par de delincuentes que se desplazaban en una motocicleta y portaban cascos.
El incidente fue reportado momentos después de las 14:00 del martes afuera del taller “Zavala”, ubicado en la calle Lombardini, entre Bernardo Reyes y Villagrán, en la colonia Bella Vista.
Las víctimas y un testigo presencial de los hechos relataron ante la Policía que los maleantes vestían chamarras negras, y los cascos del mismo color les impidieron observarles la cara.
Agentes ministeriales y oficiales de la Policía Municipal de Monterrey dialogaron con el propietario del negocio.
Ante las autoridades se estableció que el afectado, en compañía de su hijo, de unos 20 años, acudió a una sucursal de Banorte que se localiza en la avenida Bernardo Reyes y Manuel Gómez Pedraza, en la colonia Industrial.
Allí retiró de su cuenta un monto de 110 mil pesos en efectivo, capital que tenía destinado al pago de algunos insumos, refacciones y aparatos para la operación de su negocio.
Con toda tranquilidad salieron del banco y abordaron un automóvil Ford Focus color gris, en el que se dispusieron a recorrer los aproximadamente 600 metros que los separaban del taller.
Apenas se estacionaron enfrente del inmueble cuando se les emparejó una motocicleta en la que viajaban dos sujetos, uno de los cuales, el que iba de acompañante, portaba una pistola y los encañonó.
Tras bajar de la unidad de dos ruedas el desconocido le arrebató la bolsa en la que llevaba el efectivo, para escapar de inmediato en compañía de su cómplice rumbo a la calle Villagrán.
Un trabajador de una empresa vecina observó el ilícito y pudo ver que los sujetos vestían de negro, pero también le fue imposible hacer una descripción del rostro de los delincuentes.
Los agentes ministeriales buscaron a más personas que pudieron haber visto los hechos, además de que recabaron las imágenes que captó una cámara de vigilancia de un negocio de estructuras metálicas.
Para las autoridades resulta extraño cómo fue que los asaltantes se dieron cuenta de que su víctima transportaba una importante suma, por lo que no se descarta que el “pitazo” lo hayan recibido desde el interior del banco.