El Gobierno de Coahuila llevó a cabo la entrega de armas de mayor poder para hacerle frente a la delincuencia organizada. Se trata de armamento capaz de atravesar blindajes y vehículos.
Tras el ataque del pasado 30 de noviembre a la alcaldía de Villa Unión y la muestra de que grupos criminales al norte del país tenían mayor capacidad de armamento, despertó del estado la inquietud y necesidad de buscar sobrepasar este poder, por ello, se adquirió armamento de grueso calibre.
El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme Solís, llevó acabo la entrega de armamento tipo: 9mm, 5.56mm y 7.62mm, para dar un total de 260 armas de fuego.
Lo cual 10.7 millones de pesos fueron invertidos, de los que 8.5 millones de pesos los invirtió el Estado y más de un millón de los municipios de Ramos Arizpe, Acuña, Matamoros y Múzquiz.
Pese a la pandemia, los tres ordenes de gobierno, señalaron que por lo hechos registrados en la zona norte y la lucha diaria contra el crimen, ameritaba la adquisición de armas de mayor poder.
En 2020 más de mil 200 millones de pesos fueron invertidos en materia de seguridad, para este año se calcula que está inversión se superada.
La entrega de este armamento fue además con la firma de un convenio con el Tribunal Superior de Justicia y la Secretaría de Seguridad para impulsar el fortalecimiento y formación de las corporaciones de seguridad.
CALE