Vicente Barranco Tovar, presidente de la Cámara Regional de la Industria Arenera (CRIA) de CdMx y Edomex, informó que las extorsiones telefónicas son una constante en contra del sector, y el derecho de piso incrementa hasta 30 por ciento sus costos, principalmente, en la zona sur y el oriente mexiquenses.
“Hablan a las minas o bancos de materiales pétreos, primero te piden datos sobre el precio de los materiales como si fueran clientes asiduos, se presenta como integrantes de ciertos grupos delictivos, te llaman por tu nombre y piden vernos para platicar. En ese momento colgamos, pero te mandan mensajes intimidatorios de WhatsApp, todo eso te obliga estar alerta”, explicó.
Los presuntos delincuentes, dijo, llaman una o dos veces a la semana por parte de diferentes números, al ver que los dueños no responden, buscan otros mecanismos para hacerlos caer; afortunadamente han tomado experiencias para evitar ser víctimas.
“Esto tiene años, los delincuentes cada vez son más descarados porque hay impunidad, hoy hay quien los controle, pero no se toman acciones al respecto”, abundó.
En el sur los obligan a acuerdos
Esta situación, resaltó, se presenta en todas las regiones de la entidad, es decir, en el norte, el centro y el sur, donde no hay llamadas sino “acuerdos” pues los delincuentes atentan directamente contra la familia, los trabajadores o los dueños de las minas, a quienes les dan “santo y seña” de todos sus movimientos.
En la zona sur el derecho de piso, mencionó, se da principalmente por parte de presuntos integrantes de la Familia Michoacana.
“Ninguno dice que da, pero tampoco niegan, simplemente trabajan porque los delincuentes controlan todas las casas de materiales; la grava, arena y demás por metro cúbico, así como los alimentos. En Valle de Bravo, por ejemplo, los precios para construcción están 30 por ciento arriba. En el oriente establecen tarifas y ya”, detalló.
Barranco Tovar refirió que aún con “acuerdos” los presuntos delincuentes vigilan los traslados y entregas de materiales para verificar que efectivamente llevan ciertas cantidades.
Por ubicación están en indefensión
La ubicación de los bancos de materiales pétreos, en muchos casos alejados de las zonas urbanas, expresó, los convierte en blanco fácil de los delincuentes porque están prácticamente incomunicados, rodeados de puro bosque, sobre veredas y caminos de terracería de difícil acceso.
“Al estar cinco o seis kilómetros alejados de las comunidades y en el bosque, ante una emergencia es muy difícil que las autoridades lleguen o respondan a una llamada de auxilio”, lamentó.
Después de los lamentables hechos registrados en Texcapilla, indicó, otros sectores afectados por las extorsiones, como los polleros, han alzado la voz, sin embargo, aún hace falta una respuesta más eficiente de las autoridades y mayor inversión seguridad.
“En días pasados a un grupo de aguacateros los reunieron para darles a conocer la nueva tarifa por parcela, pero nadie protestó, algunos han optado por dejar de trabajar sus tierras y otros han accedido porque saben que pueden perder su patrimonio”, concluyó.
SNGZ