A las ocho quince de la noche, los protocolos de seguridad entorno a la operación del Aeropuerto Internacional Francisco Sarabia de Torreón, Coahuila fueron activados en primera instancia por una supuesta amenaza de bomba.
Ante los hechos, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, Guardia Nacional, entre otras, acudieron al sitio, donde el vuelo 2005, de la línea Viva Aerobús con destino a Cancún, Quinata Roo permaneció en plataforma mientras las Fuerzas de Seguridad y el personal del 33 Regimiento de Infantería de la SEDENA investigaron el hecho.
Minutos más tarde, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Coahuila, dio a conocer que un hombre que cargaba dos encendedores en su bolsa de mano, fue el motivo para que el capitán a cargo actuara con la activación de alerta por lo prohibido que está el ingreso sin autorización de objetos flamables.
Al lugar se dieron cita diferentes corporaciones de seguridad policíacas y militares como parte de los procedimientos, donde se incluye el arribó de un par de ambulancias de la Cruz Roja, quienes no reportaron personas que requirieran su atención.
La Fiscalía de Coahuila descartó minutos más tarde que se tratara de algún peligro y confirmó que fue un procedimiento establecido por los mecanismo de control de la seguridad aeroportuaria.
"Se trató de un pasajero que traía un par de encendedores en su equipaje de mano luego de que se le indicara que no podía abordar él, lo que permite que se activen los protocolos correspondientes de seguridad por parte del capitán del aeropuerto", declaró en su oportunidad el fiscal general de Coahuila, Gerardo Márquez Guevara.
Ante los hechos, personal del Escuadrón Antibombas apoyados por un binomio acudieron a la zona, minutos más tarde, la alerta general se descartó y finalmente el avión salió a su destino.
"En este protocolo no se hace la salida del vuelo de inmediato, se hace una revisión total de la aeronave y de los equipajes, lo que representa un retraso en el vuelo".
"Se nos notifican los hechos y mandamos a personal de la Fiscalía para una supervisión, sabemos que es un tema de carácter federal pero al tener una coordinación en seguridad tenemos acceso a esta información", dijo.
Además no hubo la necesidad de retrasar más vuelos por la activación de una alerta de esta naturaleza y las actividades trabajaron con normalidad.
Respecto al pasajero, se informó que quedó bajo un proceso administrativo que podría llegar a la inhabilitación para volar al omitir una regla básica de seguridad.