A más de siete años del multihomicidio en un departamento de la colonia Narvarte, la Fiscalía de la Ciudad de México todavía no sabe qué ocurrió el 31 de julio de 2015, acusaron familiares de las víctimas, quienes afirmaron que las indagatorias están estancadas.
Al realizar una protesta frente al búnker de la Fiscalía capitalina, los familiares recriminaron que la institución a cargo de Ernestina Godoy no ha agotado todas las líneas de investigación del caso. Francisco Calderón, representante legal de la familia Espinosa Becerril, demandó una mayor proactividad del Ministerio Público.
“Después de siete años, todavía la fiscalía no sabe qué es lo que pasó ese 31 de julio, por ende, todavía no sabe el móvil y por ende no ha identificado a los autores intelectuales”, acusó.
Patricia Espinosa, hermana del fotoperiodista Rubén Espinosa –una de las cinco víctimas del multihomicidio– señaló que hay mesas de trabajo con la Fiscalía de la Ciudad de México, pero el avance en las indagatorias ha sido nulo.
“Ahorita se siguen mostrando dispuestos con las mesas de trabajo. Sin embargo, los hallazgos que uno les presenta, o las evidencias, prácticamente no son consideradas, y ellos tampoco avanzan en su investigación. Entonces realmente es como dejar pasar el tiempo para que ellos terminen su gobierno, y prácticamente poder decir que sí hubo acercamiento con las familias, el trato que antes era revictimizante ha vuelto. Entonces las prácticas continúan siendo las mismas que la procuraduría, finalmente cambian de color, cambian de nombre, pero nos quedamos con la misma situación porque no hay avances en la investigación”, aseguró.
El abogado Francisco Calderón expuso que actualmente la Fiscalía de la Ciudad de México sigue tres principales líneas de investigación; delincuencia organizada, trata de personas y activismo.
“La primera relacionada con delincuencia organizada, de acuerdo con la información sesgada que dio la entonces procuraduría, esta línea era fortalecida por perjuicios, estigmatizaciones del hecho de que una de las víctimas era colombiana, se decía que era un problema de drogas, sin embargo, no hay ningún indicio que llegue a esa conclusión. La segunda es en relación con la trata de personas. Dos de las víctimas tenían como actividad económica ser modelos escort. Y bueno, la tercera es por la actividad periodística y activismo de Nadia y de Rubén en el estado de Veracruz, que recibieron amenazas directas, que recibieron actos de violencia por parte del gobierno de Duarte”, expuso.
Patricia Espinosa añadió que, al revisar la carpeta de investigación, han hallado que, en el multihomicidio, participaron al menos cinco personas y que un segundo automóvil estuvo relacionado con los hechos en los que fueron asesinados Yessenia Quiroz, Mile Martín, Alejandra Negrete, Nadia Vera y Rubén Espinosa.
“Ya les presentamos que han sido más involucrados, al menos cinco que participaron en el momento de los hechos, o sea, materiales, y muchas más intelectuales, porque también con los cruces de las llamadas hemos podido ver que hay personas que operaban desde afuera, independientemente de los cinco que podemos ver en los autos. El hallazgo también es que no solo iba la camioneta, sino que iba otro auto siguiendo a la camioneta, en donde había más participantes, y el número del teléfono que se perdió su registro prácticamente, porque lo pidieron erróneamente tres veces, es un número clave para la investigación”, detalló.
dr