El ex líder del Cártel de Guadalajara, Miguel Ángel Félix Gallardo, podría volver hoy a su casa después de 33 años de permanecer en prisiones federales, pero no por haber cumplido sus sentencias, sino por razones de salud.
El último juicio de amparo que tenía pendiente para que se le sustituya la pena de prisión preventiva y pase sus últimos años de vida en prisión domiciliaria, acaba de ser sobreseído por un juez federal de Jalisco.
Sin embargo, la Fiscalía General de la República (FGR) tiene la última palabra, porque aún no se ha desistido de haber apelado la resolución de otro juez, que avaló que el capo se vaya a su casa y se le coloque un brazalete electrónico.
A principios del presente mes, a El Jefe de Jefes se le otorgó el beneficio de prisión domiciliaria, solo por el proceso donde enfrenta una sentencia de 40 años de prisión por delitos contra la salud, acopio de armas y cohecho.
Félix Gallardo estaba a la espera que de un juez de Jalisco se pronunciará en el mismo sentido en la causa penal por el homicidio del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar, y del piloto Alfredo Zavala Avelar, donde fue condenado a 37 años.
Pero como el otro juez sobreseyó la demanda, todo apunta que el capo de capos recobrará su libertad, por la cual ha peleado durante años, debido a su precario estado de salud.
Hoy, en la Comisaría para Sentenciados del Estado de Jalisco, en el Complejo Penitenciario de Puente Grande está programada la audiencia donde se definirá si Félix Gallardo puede irse a casa.
Es de mencionar, que el caso de Félix Gallardo ha sido abordado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien ha reconocido que es una persona enferma que no puede seguir en la cárcel.
"Se hizo un análisis médico y el señor verdaderamente está mal de salud, tiene muchas enfermedades, está mal…y no puede ser atendido en el reclusorio, tiene que estar atendido en una casa con su familia. Va a estar preso, tienen que aceptar el portar un brazalete aun estando enfermo, pero que se le dé la oportunidad de ser atendido ya en una situación de salud bastante, bastante, delicada”, manifestó en una de las conferencias mañaneras.
En la década de los 80, Félix Gallardo era conocido como el capo de capos porque narcotraficantes como Amado Carrillo Fuentes, El Señor de los Cielos; Héctor Luis El Güero Palma Salazar, Joaquín El Chapo Guzmán y los hermanos Arellano Félix, entre otros, eran sus empleados.
Durante los últimos meses, Félix Gallardo recibió reveses judiciales. Por ejemplo, en enero de este año, un Tribunal Federal resolvió no ampararlo contra la condena de 40 años de cárcel.
Solo se ordenó dar vista a la Fiscalía General de la República para que investigue la denuncia del capo, quien aseguró que tras su detención en la década de los 80 fue víctima de tortura por parte de los agentes que lo capturaron.
Asimismo, en marzo pasado la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dejó firme la sentencia, porque desechó el amparo del narcotraficante, porque lo presentó después de la reforma judicial, y porque el caso no reviste “un interés excepcional en materia constitucional o de derechos humanos”.
ledz