En la semana del 21 al 27 de septiembre se registraron por lo menos siete feminicidios en México, que se viralizaron en redes sociales y ocasionaron protestas en las calles, ante el aumento de la violencia contra las mujeres.
La colectiva feminista Las Brujas del Mar indicó que el 24 de septiembre fueron asesinadas Lucero y Carmen o Caramelo, en Baja California y Zacatecas, respectivamente.
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Jessica, Noemí, Nayeli y Alexandra fueron asesinadas el 25 de septiembre en Michoacán, Querétaro, Chiapas y Estado México, respectivamente, mientras que Alondra fue asesinada el día 26 en Coahuila.
En entrevista con MILENIO, Arussi Unda, vocera de la colectiva, dijo que después de informar acerca del feminicidio de Jessica en Morelia, de manera exponencial se dieron a conocer los otros casos.
“Este fin de semana que salieron tantas y pensar en las que no salieron asusta, por eso nosotras pusimos un mensaje en Twitter de “esto es terrorismo”, porque esto crea pánico entre las mujeres, porque la mayoría de estos feminicidios fueron perpetrados por personas que ellas conocían: una fue su cuñado, otra su ex pareja, otra su pareja… creo que es un estado de terror permanente en el que estamos las mujeres”, comentó.
Arussi resaltó que los feminicidios que se viralizan es por la saña, crueldad y la visibilización de colectivos feministas de todo el país que a través de redes de comunicación nacional hacen que los casos se empiecen a escuchar.
“Están asesinando en promedio a 11 mujeres diarias en México, esas son de las que nos enteramos; porque al final de cuentas es cuando hay un cuerpo, si no encuentran el cuerpo no hay asesinato, no hay feminicidio, realmente ¿Cuántas mujeres de las que no han encontrado sus cuerpos no están entrando en esta cifra?”, cuestionó.
Además de la violencia y saña otra cosa que tienen en común estos casos es la edad de las víctimas, pues la mayoría de ellas eran chicas muy jóvenes, la mayor de ellas era Carmen, mejor conocida como Caramelo en el mundo cholero y de la cultura “lowrider”, quien tenía alrededor de 35 años.
“Personalmente, esto me hace preguntarme qué está pasando con estos morros, ¿por qué hay morros de 19 a 21 años matando a sus novias? Asusta porque están saliendo bastantes feminicidios que son perpetrados por hombres muy jóvenes”, mencionó.
La vocera de Las Brujas del Mar resaltó que la conciencia, indignación y despertar de la sociedad sobre los casos de feminicidio es efímera, ya que el tema solo fue fundamental previo al paro nacional de mujeres; todos hablan y reprobaban los feminicidio de Ingrid y Fátima e incluso apoyaron la marcha del 8 de marzo y el “día sin mujeres”, sin embargo, después de eso el tema se perdió en lo absoluto.
“Poquito tiempo después de estos sucesos, ya estábamos en los viejos hábitos de las violencias simbólicas, psicológicas e institucionales: otra vez veíamos a los medios de comunicación revictimizando, a las instituciones que se metieron al paro violentando mujeres y a los hombres burlándose de las mujeres y diciéndoles putas, realmente ¿Cuánto tiempo dura este despertar de conciencia?”, dijo.
En ese sentido, puntualizó que el feminicidio es el final de la cadena de violencia, cadena que se forma por la réplica de pequeñas violencias, que desatan una crisis de feminicidios en el país, cuando se trata a las mujeres como ciudadanos de segunda y se les ve únicamente como objetos.
“No se nos trata de una manera ni remotamente similar a como se ve y se trata a un hombre, nos tratan como si fuéramos tontas, locas o cosas, mientras no quitemos esa manera de ver a las mujeres en México, no vamos a terminar con esto, es frustrante porque qué nadie quiere hacerse responsable de esta crisis de feminicidio ”, afirmó.
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Asimismo, dijo que el nivel de impunidad en México es del 92 por ciento, lo que implica que sólo el ocho por ciento de los casos llegan a proceso y de esos un porcentaje todavía más pequeño son los que llegan a sentencia, derivando así que no existe una atención integral a los casos de violencia de género y feminicidios.
“Llama la atención por ejemplo, con el feminicidio de Lucero, en donde existían denuncias previas en contra de su feminicida, pero las autoridades no hicieron caso, al final de cuentas este feminicidio fue en complicidad con el estado porque si ellos hubieran atendido la denuncia previa probablemente esta mujer estaría viva”, destacó.
También señaló que lejos de reparar el daño a las familias de las víctimas, son muchos los casos donde las familias de las víctimas tienen que irse de donde viven, porque la repercusión de haber denunciado a un agresor los vuelve a su vez víctimas de violencia, lo que hace que la gente no confié en las instituciones.
“Estoy segura que muchas familias han de haber sufrido un feminicidio en silencio por miedo a repercusiones, eso es todavía más lamentable porque se requiere muchísimo valor para alzar la voz, denunciar, pedir que te acuerpen y que griten contigo.
"Hay mucha gente que desgraciadamente sabe que puede ser muy peligroso el alzar la voz por la persona a la que asesinaron, entonces prefieren llevar eso en silencio”, resaltó.
Arussi exigió coherencia y cero tolerancia en todos los ámbitos de la vida social, familiar y publica, para no permitir más violencia y deshumanización de la mujer en ningún espacio.
“No podemos ser indolentes e indiferentes a todo lo que está pasando, no podemos abonar a esta cultura machista que asesina mujeres, si nosotros como sociedad no hacemos algo al final eso es un reflejo de lo que está ocurriendo socialmente, porque si nosotros como sociedad condenáramos de verdad todas estas acciones no tendríamos el gobierno que tenemos no se nos haría equis que no se condene la violencia contra la mujer, ni que estén matando once mujeres al día, estaríamos rompiendo todas las ciudades”, comentó.
FLC