Los estados de Sonora, Baja California y Sinaloa –todos con presencia y operación del Cártel de Sinaloa– concentran el 89 por ciento del fentanilo decomisado en todo el país por elementos del Ejército mexicano, en la primera mitad del sexenio de Andrés Manuel López Obrador.
De acuerdo con un informe de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) obtenido por MILENIO a través de transparencia, de diciembre de 2018 a enero de este año los militares aseguraron mil 463 kilogramos de fentanilo en el país, cuyo valor comercial en conjunto rebasa los 292 millones de dólares.
Esta cantidad de fentanilo fue decomisada en siete entidades. La mayor parte en Sonora –estado disputado por el nuevo Cártel de Caborca y el Cártel de Sinaloa–, donde el ejército aseguró 565 kilogramos, es decir, el 38 por ciento del total.
Le sigue Baja California, donde el cotizado control de la ciudad fronteriza de Tijuana es peleado por los cárteles Jalisco Nueva Generación, Sinaloa y los Arellano Félix, principalmente. En esa entidad, la Sedena decomisó 460 kilogramos de fentanilo en los primeros 38 meses de gobierno de López Obrador, es decir, el 31 por ciento.
La tercera entidad con más decomisos de esta droga es Sinaloa, cuna y bastión del Cártel de Sinaloa, con 280 kilogramos asegurados, cifra que representó el 19 por ciento.
Según la Sedena, los insumos para la elaboración del fentanilo llegan a nuestro país procedentes de China, principalmente, a través de los puertos de Manzanillo y Lázaro Cárdenas. Después son trasladados a entidades del norte del país, para su elaboración y posterior trasiego a Estados Unidos.
“Si ves la mayor parte de estos estados están en la costa del pacífico o muy cerca, y están básicamente al norte del puerto de Manzanillo, y es un negocio de exportación, fundamentalmente va a dar a Estados Unidos. El fentanilo es lo que ha venido sustituyendo a la heroína, y va a dar a este mercado grande de Estados Unidos”, explicó Santiago Roel, fundador del Semáforo Delictivo Nacional.
Consultado por MILENIO, el especialista en seguridad pública consideró que ningún cártel tiene controlado al 100 por ciento el mercado del fentanilo en México, porque las entidades que registran más decomisos de esta droga tienen, a su vez, una alta incidencia de homicidios dolosos.
“Siempre que hay muertes, es decir, tasa de homicidios muy alta, quiere decir que no está claro, hay varios cárteles peleándose las rutas, los laboratorios y obviamente el trasiego de fentanilo. Si fuera un solo cártel, la costa del Pacífico estaría tranquila, no es así, los homicidios están muy altos en todos los estados del pacífico”, detalló.
El resto de las entidades que tuvieron aseguramientos de fentanilo en los primeros tres años de este sexenio son Durango, con 100 kilogramos, Jalisco con 52 kilogramos, Chihuahua con tres kilogramos y Baja California Sur con .9 kilogramos.
Santiago Roel consideró que el decomiso es un porcentaje muy pequeño de las cantidades de fentanilo que se trafican a territorio norteamericano, y sostuvo que Estados Unidos debe combatir el consumo de esta droga, para reducir su trasiego.
“La solución integral no está en el combate policiaco del asunto, y eso es un tema de Estados Unidos, porque ellos son los que tienen los consumidores, México realmente no tiene un problema de consumo de fentanilo, yo creo que la postura, sin dejar de atender las peticiones del gobierno de Estados Unidos, la postura más inteligente sería presionarlos, y tomar una decisión más integral”, señaló.
En tanto, el “Índice Global de Crimen Organizado 2021, elaborado por la iniciativa mundial contra la delincuencia organizada transnacional, alertó que el consumo de fentanilo va creciendo en México.
“El fentanilo y sus precursores se producen predominantemente en China, con cárteles mexicanos que importan y trafican los productos a Estados Unidos. Además, el consumo de fentanilo está aumentando en México, principalmente el que se combina con heroína callejera en polvo blanco y alquitrán negro, para efectos más duraderos”, detalló.
DMZ