En Santa Rosa de Lima, comunidad perteneciente al municipio de Villagrán y donde anteriormente se le conocía como centro de operaciones de un cártel dedicado principalmente al robo de combustible la paz comienza a regresar y los pobladores ya aceptaron a las Fuerzas del Estado, así lo aseguró Sophia Huett, Comisionada de Seguridad.
“En Santa Rosa de Lima vamos muy bien, había demandas muy legítimas por parte de algunos pobladores, ellos comentaban que justamente cuando algunos pobladores agredían a los policías, ellos resultaron dañados porque sus vehículos resultaron dañados, causados, insisto, no por la autoridad, sino por los propios manifestantes”, comentó.
La comisionada explicó que las jornadas ‘Impulso’, han logrado regresar poco a poco la tranquilidad y los pobladores han sido dignificados pues ahora cuentan con servicios básicos que anteriormente no tenían, entre ellos la seguridad y el acercamiento con las autoridades, aunque reconoció que aún falta mucho por hacer.
"En el tema de seguridad a todos nos gustaría que nos dijeran hay operativo Golpe de Timón, puedes dejar la bicicleta afuera y nadie se la va a robar, la realidad es que tienen que hacer cambios paulatinos así como la seguridad se vuelve compleja con el paso de los años los resultados también requieren lapsos de tiempo; hay un estado responsable, un gobernador responsable ocupado de tiempo completo en seguridad, es un gobernador que no ha buscado desplazar culpas, lo que se está trabajando es en detener a generadores de violencia", explicó.
Dos meses después de que inició el operativo Golpe de Timón y que por primera vez en la historia de Guanajuato, un gobernador acompañado de todo su gabinete pisaron y recorrieron la comunidad también conocida por algunos como "Tierras huachicoleras", donde en meses anteriores se robaba combustible, se encontraron explosivos y se registró la quema de vehículos.