Un juez federal dio comienzo a la audiencia donde el presidente del patronato de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, Gerardo Sosa Castelán, será imputado por la Fiscalía General de la República (FGR) por los delitos de operaciones con recursos de procedencia ilícita y defraudación fiscal.
La diligencia se realiza a puerta cerrada en el Centro de Justicia Penal Federal adscrito al penal de máxima seguridad del Altiplano, en el Estado de México.
La Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) judicializó una carpeta de investigación a partir de una pesquisa que inició por una denuncia de la Unidad de Inteligencia Financiera presentada en 2019.
Se presume que Sosa Castelán trianguló recursos de diversas empresas, compañías que pertenecen a la misma casa de estudios. Los delitos que se le busca imputar no ameritan prisión preventiva oficiosa, por lo que en caso de ser vinculado a proceso podrá solicitar que se le aplique una medida cautelar para enfrentar su proceso fuera de prisión.
Aunque también existe la posibilidad de que el imputado solicite la duplicidad del término constitucional para presentar pruebas a su favor.
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El año pasado, Sosa Castelán promovió amparos contra una posible orden de aprehensión solicitada en su contra, mientras que la UIF comenzó a investigar a la casa de estudios por un presunto lavado de 156 millones de dólares.
Santiago Nieto, titular de la UIF, dijo en aquella ocasión que la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo recibió recursos provenientes de Suiza, a partir de cuentas en 22 países, en varios espacios geográficos.
Sosa Castelán promovió amparos contra una posible orden de aprehensión solicitada en su contra, pero fue detenido ayer en las inmediaciones de la colonia Agricultura, Alcaldía de Miguel Hidalgo, en la Ciudad de México, cuando asistía a una reunión.