Durante las primeras horas de este martes 23 de mayo, se dio a conocer la localización de cuatro cadáveres en el estado de Puebla; mismos que ya son investigados por la autoridad.
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Coronango
El primer hallazgo se dio en un campo de cultivo del municipio de Santa María Coronango, donde el cadáver de un hombre con signos de violencia fue encontrado envuelto en bolsas plásticas por pobladores de la Junta Auxiliar de San Francisco Ocotlán.
Cuando agentes de la policía municipal llegaron al sitio ubicado entre la calle José María Morelos y la Hombres Ilustres, los civiles los guiaron hasta el punto donde un paquete plástico despedía un aroma fétido.
Tras una primera inspección, los policías confirmaron que al interior de las bolsas se encontraba el cuerpo sin vida de un hombre, de quien se desconoce la identidad; por consiguiente, agentes de investigación adscritos a la Fiscalía General del Estado (FGE) con sede en San Pedro Cholula realizaron el levantamiento de cadáver y primeras diligencias con la carpeta de investigación FGEP/CDI/FIM/HOMICIDIOS-I/009744/2023.
Nopalucan
El segundo caso se dio en
Nopalucan, donde un grupo de ciudadanos reportó el
hallazgo de un hombre muerto envuelto en plástico.
Agentes de la Policía Municipal acudieron al llamada y tras una breve entrevista con los ciudadanos realizaron una inspección al paquete. Sin abrirlo pero ante el olor fétido y la forma, los agentes locales decidieron pedir apoyo de especialistas de la Fiscalía General del Estado (FGE) para que ellos indagaran sobre el caso.
Personal forense y ministerial corroboró que era el cadáver de un hombre que presentaba múltiples huellas de violencia. Los habitantes de la zona han destacado que este evento podría ser asociado con enfrentamientos entre grupos delicuenciales.
San Salvador El Verde
Por último, en el municipio de San Salvador El Verde, se localizaron los cuerpos de un hombre y una mujer con huellas de violencia.
Campesinos que transitaban por los caminos de terracería de la Junta Auxiliar de San Lucas El Grande, los encontraron y dieron aviso al 911. Policías municipales e incluso paramédicos acudieron al llamado, sin embargo solo pudieron acordonar el área y certificar que las víctimas de entre 35 y 40 años de edad ya no contaban con signos vitales.
Personal del Ejército Mexicano y Policía Estatal se trasladaron a la escena del crimen donde custodian el perímetro mientras que forenses y ministeriales realizan el levantamiento de cada y aperturan una carpeta de investigación del caso.
CHM