La mañana de este 13 de diciembre un hallazgo causó temor entre habitantes del municipio de Tulancingo, luego de que localizaran un cuerpo humano decapitado a orillas de la carretera.
Tras lo anterior, el hecho fue denunciado y fue registrada una intensa movilización de las autoridades aproximadamente a las 7:40 horas que mediante la línea de emergencia 911 comenzaron a emitirse reiterados reportes, aunque al inicio fue de una persona tirada.
Ante la magnitud de lo narrado, de inmediato fueron despachados paramédicos de la delegación Tulancingo de la Cruz Roja, ya que el tramo de la carretera México-Tuxpan, en el entronque Pitula-San Alejo, a la altura del puente de Zototlán, donde ocurrió el hecho pertenece a ese municipio, quienes acudieron en coordinación con agentes de la Secretaría de Seguridad Pública local y se avocaron a atender a la persona.
Sin embargo, la sorpresa que se llevaron los expertos en emergencias fue que la persona ya no contaba con su cabeza, misma que fue hallada en un diámetro de seis metros del cadáver, del que, a propósito, fue descrito vestía una chamarra larga color verde, pantalón negro de mezclilla y calcetines cafés, pero ya estaba sin vida.
Al parecer se trataba de un hombre en situación de calle y una causa preliminar que se dijo sobre su muerte y violenta decapitación fue que habría sido atropellado por un vehículo de características desconocidas y por la fuerza del impacto, o bien al caer al suelo, su cabeza se desprendió.
No obstante, agentes de la Policía de Tulancingo y de la Guardia Nacional (GN) que igual acudieron a prestar apoyo levantaron un acordonamiento en la zona de la autopista México-Tuxpan, ya que dejaron la escena a cargo de peritos de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo (PGJEH)