La Fiscalía General de Justicia en Sonora (FGJE) informó que los resultados de las pruebas de ADN realizadas a los restos óseos encontrados el 4 de mayo en la costa de Hermosillo, confirman que no corresponden al hijo de Ceci Patricia Flores Armenta.
Luego de casi cuatro días del hallazgo de una osamenta en un predio ubicado en el kilómetro 88+300 de la carretera 100 Hermosillo – Bahía de Kino, la FGJE dio a conocer mediante una publicación en sus redes sociales que la confronta de ADN con la líder del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, dio negativo.
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Ese día se cumplían cuatro años de la desaparición de Marco Antonio en Bahía de Kino y Ceci convocó a una jornada de búsqueda especialmente para él, tenía la esperanza de encontrarlo en ese predio junto a la carretera porque había recibido una llamada anónima que le indicaba que ahí lo encontraría.
La convocatoria fue atendida por un grupo pequeño de sus compañeras del colectivo que llegaron desde Hermosillo e incluso desde Santa Ana a apoyarla en las labores de rastreo, con el acompañamiento de personal de la Comisión Estatal de Búsqueda, la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC), la Guardia Nacional y la Policía Estatal.
Tras revelarse que los restos encontrados no correspondían a su hijo, Ceci Flores afirmó que volverá al mismo predio a seguir buscándolo pues las indicaciones del informante anónimo fueron muy claras, además que una de sus hijas ha soñado a su hermano en ese mismo sitio.
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“Sigo luchando, voy a seguir esta búsqueda incansable por traer a mi hijo de vuelta a casa, pero también voy a seguir luchando incansablemente porque las autoridades hagan su trabajo de búsqueda e investigación, y Marco Antonio vuelva lo más posible a casa”, comentó.
Ceci Flores busca a sus dos hijos; Alejandro desapareció en 2015 en Los Mochis, Sinaloa, tenía 21 años; casi 3 años después, el 4 de mayo de 2019, “levantaron” a otros dos de sus hijos en Bahía de Kino, Sonora, uno de ellos, Jesús que apenas tenía 15 años, fue liberado el 10 de mayo con evidentes marcas de tortura, pero el mayor, Marco Antonio de 31 años, continúa desaparecido.
La Fiscalía informó que se mantienen los análisis por personal de Servicios Periciales para identificar los restos encontrados y poder entregarlos a sus familiares.
DMZ