Un grupo de alrededor de treinta citricultores del municipio de Huautla, que forman parte de una cooperativa de naranja llamada “citricultores Huautlenses”, realizan el corte de la naranja de manera artesanal, "sin maquinaria o aparatos sofisticados" y gracias a su ardua labor y esfuerzo, actualmente la comercializan en empresas multinacionales como Walmart y JUMEX.
En entrevista para Milenio José Manuel Ruiz, integrante de la cooperativa “Citricultores Huautlenses”, refirió que empiezan con sus labores desde las 7:00 horas de la mañana, de lunes a viernes.
“Nuestros papás empezaron a sembrar naranja desde hace como unos 20 o 30 años pero antes no tenía mucha demanda, porque igual había mucha naranja y venían los intermediarios a comprar y nunca vimos cómo se trabajaba directo con la naranja, nosotros solo la vendíamos y ellos la cortaban y entonces, nos organizamos y ahora la estamos cortando nosotros y nosotros lo vendemos directamente a las empresas… la naranja la estamos llevando a México a la empresa Jumex, en Ecatepec la entregamos y lo que es Walmart, pues igual en México”.
Agregó que gracias a esta actividad han otorgado empleo directo a varios de los habitantes de la zona y por día cortan hasta 10 toneladas de naranja.
“Por día cortamos diez toneladas, depende de cuantos peones vengan, nosotros somos treinta, pero a veces por cuestiones personales no vienen todos y va variando, a veces cortamos 10 o 12 toneladas al día, sin maquinaria”.
Por su parte, Mucio Cabrera, citricultor de Huautla, indicó que el ayate y la escalera son algunas de sus principales herramientas de trabajo, para cortar las naranjas, cargarlas y luego acomodarlas en las taras.
Enfatizó, “Empezamos con la temporada de corte casi a días de diciembre, nosotros lo que hacemos es venir a cortar aquí a la huerta desde temprano, para hacer los cortes traemos una escalera que es como nuestra herramienta para escalar en los árboles altos…y también traemos nuestra herramienta que aquí lo conocen como ayate, donde vamos almacenando la naranja que vamos cortado del árbol”, informó Mucio Cabrera, quien también forma parte del grupo de citricultores.
Y en ese sentido, mencionan que cuentan con el apoyo del área de sanidad vegetal que les otorga asesoría para el control de plaga y además durante el proceso, los controles de calidad son estrictos, desde el corte, la selección, el lavado y etiquetado para luego acomodarlo en taras para su empaquetado.
Por lo anterior, los citricultores señalan estar orgullosos de su labor, ya qué gracias a este trabajo mantienen a sus familias.