Las autoridades ministeriales han identificado hasta el momento a 11 de las 12 personas que murieron durante los atentados contra seis bares y cantinas de la zona metropolitana, el pasado fin de semana.
Al mismo tiempo, algunos de los nueve lesionados ya fueron dados de alta en los hospitales y, aunque no se han reportado más decesos, por lo menos dos de los heridos continúan en condiciones delicadas de salud.
La víctima del bar 'El Ancla de Oro', en el centro de Monterrey, se llamaba Hugo Alberto Hernández Reyes, 'El Tyson', portero del negocio, de 35 años de edad.
Las personas que fueron asesinadas en la cantina 'Rancho Viejo', del municipio de Juárez, fueron identificadas como José Eduardo Soto Luna, Darío Moreno Lugo, Misael Alejandro Rodríguez Cervantes, Juan Reynaldo Torres Canizales, José Luis Armendáriz Moreno y Neyda Jazmín Paz Méndez.
Todos ellos eran clientes del establecimiento, salvo la joven de 19 años, quien laboraba como mesera.
Las víctimas en el bar 'Bohemios', de la colonia Cañada Blanca, en Guadalupe, son Francisco Javier Montoya Turrubiates, de 25 años de edad, y Ovidio Servando González Guzmán, de 26.
En lo que respecta al centro nocturno 'La Mitotera', de la colonia San Bernabé, en Monterrey, las personas asesinadas se llamaban Alejandro Morales Martínez e Hipólito Ismael Zamarripa, quienes trabajaban en el acceso.
Hasta el momento el personal de la coordinación de Homicidios de la Agencia Estatal de Investigaciones continúa con las pesquisas para establecer los datos de quienes cometieron los arteros ataques.
Según reportes preliminares, se trató de acciones coordinadas y en varios casos simultáneas, orquestadas por integrantes de un grupo de la delincuencia organizada, del que ya se tienen algunos indicios.
El primero de los atentados tuvo lugar en el centro de Monterrey a las 21:30 del sábado en el primer cuadro de la ciudad, y el último a las 00:40 del domingo en la zona de San Bernabé.
Trascendió que, lejos de tratarse de represalias por el cobro 'de cuotas' o 'piso', las agresiones obedecieron a la disputa por los puntos y zonas de venta de drogas.