En el Hospital General de Mexicali, Baja California, se realizó la procuración de dos riñones y córneas que serán donados a dos pacientes en lista de espera.
La procuración de órganos se realizó gracias a la voluntad de la familia de un hombre, de 60 años de edad, quien falleció a causa de enfermedad vascular cerebral (EVC) del subtipo hemorrágico, y al equipo de profesionales de IMSS-Bienestar que formaron parte del proceso.
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“Posterior a la realización de los estudios de compatibilidad a los posibles receptores, fueron seleccionados dos pacientes del Hospital General de Mexicali para ser beneficiados: una mujer en espera de un riñón por más de cuatro años y un hombre con dos meses de espera, quienes ahora tendrán una nueva oportunidad de vida. Luego del procedimiento de trasplante, ambos se recuperan de manera favorable”, de acuerdo con un comunicado de la dependencia.
¿Cómo se llevó a cabo el procedimiento?
Para concretar con éxito las intervenciones, el equipo médico de diferentes disciplinas del IMSS-Bienestar llevaron a cabo los procedimientos con estricto apego a protocolos sanitarios y medidas de bioseguridad.
Con esta donación realizada en el Hospital General de Mexicali, este año se contabilizan dos, igualando la cantidad de donaciones de 2023.
Estas acciones son resultado de los esfuerzos continuos de IMSS-Bienestar por fomentar y fortalecer la cultura de donación de órganos y tejidos entre la población de Baja California y el compromiso de mejorar la calidad de vida de pacientes que enfrentan desafíos de salud.
IMSS-Bienestar invita a la población a convertirse en donador altruista de órganos y salvar vidas.
Últimas noticias en materia de salud
El Centro Médico ABC logró, a través del Código AMI (Acute Myocardial Infarction, por sus siglas en inglés), reducir a menos de 60 minutos el tiempo para restablecer el flujo sanguíneo del corazón y, con ello, salvar la vida de una persona con una afección cardiaca.
Las enfermedades isquémicas son la causa de muerte en México, con 155 mil 706 decesos registrados durante 2022 y que además generan gastos catastróficos a las finanzas públicas y familiares.
El Código AMI, de acuerdo con Ernesto Ban Hayashi, jefe de cardiología del Centro Médico ABC, es un riguroso protocolo de atención que tiene como meta evitar en un lapso no mayor de 90 minutos, en su caso, ya lograron a reducir el tiempo a 60 minutos, que una persona se complique y fallezca justo en ese momento que está experimentado un infarto.
“Son muy pocos los que llegan a la clínica cuando las arterias coronarias se saturan y obstruyen con depósitos de grasas impidiendo la expulsión de la sangre”, explicó.
Y la gran mayoría de mexicanos, abundó, desconoce que tiene dicho problema hasta que debuta con un dolor intenso en la parte media del corazón que puede abarcar el brazo izquierdo, la garganta o cuello; falta súbita de aire, desmayo, sensación de angustia, ansiedad, sudoración, entre otros síntomas.
RM