La pena máxima de 70 años de prisión dictada contra Erick Francisco Robledo por el feminicidio de Ingrid Escamilla, ocurrido en febrero de 2020, es un ejemplo del Poder Judicial capitalino para los delincuentes que quieran agredir a las mujeres, aseguró Javier Gallardo, abogado de la familia de la víctima.
En entrevista para MILENIO, consideró que la determinación del juez Israel Pérez Cuevas envía un mensaje claro a los victimarios de que pueden pasar el resto de su vida en prisión si cometen un feminicidio.
“Básicamente es un ejemplo que da precisamente el Poder Judicial para todo aquel tipo de delincuente que pretenda seguir mermando a nuestra sociedad, y en específico a las mujeres. Espero que los delincuentes tengan esa circunstancia de no cometer el delito, porque pues ante esta penalidad, y si se les llega obviamente a comprobar la comisión del delito, pues van a estar encerrados prácticamente de por vida. Entonces, esperemos que sea un buen mensaje para todos los victimarios”, apuntó.
El litigante explicó que el Código Penal para la Ciudad de México contempla penas que van de los 35 a los 70 años de prisión, por el delito de feminicidio, según las circunstancias de cada caso.
Javier Gallardo recordó que hay un funcionario vinculado a proceso por difundir las imágenes del deceso de Ingrid Escamilla, aunque precisó que desconoce el nombre del servidor público.
“Tenemos entendido que sí vincularon por ahí a proceso a un funcionario público, pero con precisión no tengo el dato, no le pudiera emitir mi opinión, sabemos precisamente que sí hubo una vinculación y que están ahorita en la etapa de juicio, y pues esperemos el resultado, verdad. Sería lo conveniente, esperar, a ver que la fiscalía, que es el órgano acusador, nos de mayor información al respecto”, señaló.
El abogado Gallardo dijo que en la audiencia de individualización de pena, Erick Francisco Robledo no hizo mayores pronunciamientos ni comentarios, y no mostró mayor sensibilidad por el feminicidio de su esposa.
“La voz la llevó siempre su defensor público, y pues bueno la imagen que en determinado momento nos arroja es de una persona que no se le vio ni un signo de arrepentimiento, realmente él no manifestó una condición de sorpresa, o de preocupación, vaya, prácticamente se le ve una persona muy fría”, apuntó.
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