Un centenar de elementos de la Guardia Nacional arribó a Villa Unión para establecer una base de operaciones, luego de que el crimen organizado atacó diversos puntos de este municipio en Coahuila el sábado pasado.
Hasta antes del ataque del cártel del Noreste —que ha dejado 22 muertos—, solo 10 policías municipales en dos patrullas se encargaban de la seguridad de todo el municipio.
“A partir de hoy (lunes) vamos a establecer personal permanente para brindarle más confianza, aun de la que se ha brindado, a la población de Villa Unión y vamos a coordinarnos con las autoridades del municipio para que ya inicien sus actividades normales”, aseguró Rubén Barraza, coordinador estatal de la Guardia.
Pasado el mediodía, dos convoyes con agentes policiacos ingresaron a Villa Unión y enseguida una decena de elementos se apostó en la sede de la presidencia municipal, así como en la iglesia que se encuentra a un costado.
Estos inmuebles, además de la sede de la Policía Municipal, así como una veintena de casas y comercios fueron baleados por la llamada Tropa del Infierno, brazo armado del cártel del Noreste.
Los mandos de esta corporación de seguridad federal explicaron que se mantendrán en el municipio “hasta que sea necesario”, además de que revelaron que continúan en la búsqueda de sicarios que participaron en el ataque al municipio.
“Estamos en la etapa en coordinación con la zona militar de seguir localizando más indicios, objetos, vehículos que se hayan quedado en diferentes caminos o brechas”, abundó Barraza.
La región luce como un pueblo fantasma: calles vacías, las tres escuelas que hay en el municipio sin clases, incluso pocos decidieron salir de sus hogares y acudir a la misa de este domingo, tradición religiosa de cada semana.
Las huellas de las batallas siguen visibles en las decenas de casas baleadas y en las inmediaciones todavía se observan casquillos percutidos en el suelo.
Frente a la sede de la policía sigue un vehículo incendiado, así como un autobús marcado con aerosol con las letras CDN, siglas del cártel del Noreste. Mientras que la presidencia municipal, prácticamente destruida, personal del ayuntamiento inició labores de limpieza y reparación.
Hoy el gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, visitará el municipio, a fin de comenzar con la reparación de casas y bienes de pobladores afectados. Al respecto, reveló que la intención de los sicarios era incendiar la alcaldía .
“Los dos detenidos manifiestan que fueron enviados por el cártel del Noreste a tratar de asustar a Coahuila, a una población que está en la entrada de la brecha. Ellos querían entrar, pegar y salir.
“Llevaban dos guías al frente que fueron abatidos por los elementos de la policía estatal, es decir, no sabían cómo salir por las brechas”, explicó.
Precisamente uno de los pobladores, bombero de oficio, y que el crimen organizado tomó como rehén para escapar por las brechas del municipio, fue velado ayer en una ceremonia privada.
Situación similar se vivió en San Pedro, Nuevo León, donde despidieron al policía Pedro Alejandro Juárez, quien acudió al llamado de auxilio de Coahuila y también fue abatido.
El gobernador Riquelme también relató que para ingresar a Villa Unión, el convoy de sicarios rodeó por la parte de Estados Unidos e ingresaron por las rancherías de Coahuila.
“Estas unidades que nos reportaron, más o menos una hora antes, que habían pasado por los ranchos, en ese momento se levanta el helicóptero, da cuenta de las camionetas, pero por nuestra extensión territorial ya era difícil llegar, por eso solo había 15 elementos”, puntualizó el mandatario estatal.
Luego de rendir su primer segundo de gobierno, el mandatario estatal también dio a conocer que la alcaldesa Narcedalia Padrón advirtió de este ataque, debido a que se negó a negociar con el grupo criminal.
Ayer, 27 ejecutados.
Comando mata a tres de un grupo musical
Tres integrantes de la banda La Fiestera fueron asesinados y seis más resultaron heridos tras el ataque de un comando en el Estado de México. En otros hechos, dos cadáveres fueron localizados en la alcaldía Iztacalco de Ciudad de México a bordo de un taxi.
La jornada violenta dejó en total 27 muertos en 12 entidades. En Oaxaca fueron asesinadas cinco personas, confirmó la Fiscalía del Justicia. En Baja California el cuerpo sin vida de una mujer fue hallado en un vehículo, unos hombres atacaron a balazos a un matrimonio que viajaba a bordo de una camioneta Mercedes Benz con placas de California y a un hombre lo asesinaron a balazos en un taller.
Autoridades registraron tres homicidios en Chihuahua; dos, en Jalisco; dos, en Guerrero; dos, en Guanajuato; uno, en San Luis Potosí; uno, en NL; uno, en Tamaulipas, y uno, en Puebla.
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Con información de: Said Betanzos, Óscar Rodríguez, Juan José García, Daniel Barquet y Javier Trujillo