La Comisión Estatal de los Derechos Humanos Jalisco (CEDHJ), emitió una recomendación dirigida al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses y a la Fiscalía del Estado por las omisiones que provocaron la saturación de cuerpos en el Servicio Médico Forense.
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Mediante un boletín de prensa la dependencia señaló, que la recomendación abarca de septiembre del 2018 a febrero del 2019, y en ella interviene la Comisión Nacional de los Derechos Humanos.
Se detalló, que fueron 444 personas fallecidas no identificadas y no reclamadas las que se acumularon y resguardaron al interior de tres cajas frigoríficas móviles y en las cámaras fijas del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses durante la crisis, sin embargo, personal de la institución advirtió de la acumulación de 605 cuerpos, lo que dio origen a la queja.
Se dio cuenta de 64 personas que fueron identificadas por sus familiares, la Comisión Estatal logró acceder a 39 indagatorias, debido a que la Fiscalía de Jalisco fue omisa en proporcionar información de los 25 casos restantes, lo que acredito la falta de coordinación entre dicha dependencia y el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos citó como ejemplo el caso de una persona occisa cuyo cadáver ingresó al instituto el 10 de noviembre del 2015, y que fue reconocido por sus familiares por algunas señas particulares, la persona que identificó el cuerpo comentó que constantemente acudía al IJCF en donde le decían que no estaba el cuerpo.
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“El organismo documentó que entre los 489 cadáveres de personas fallecidas sin identificar y los 52 neonatos y nonatos que fueron inhumados, 25 cadáveres y 37 óbitos no contaban con información que los vinculara con alguna indagatoria en razón que los datos se borraron y desvanecieron de los materiales utilizados (bolsas y etiquetas), debido a la mala praxis implementada por el IJCF”, se lee en el boletín.
También se advirtió del almacenamiento sin identificar de al menos 700 urnas con cenizas de cuerpos cremados no reclamados, y que en el antiguo edificio del IJCF de la calle Belén, permanecen 72 cadáveres sin identificar.
Entre los puntos dirigidos a la Fiscalía que resaltan de la recomendación se pueden mencionar: en prácticamente todos los casos, no se realizaron las diligencias de investigación adecuadas en las indagatorias para lograr el esclarecimiento de los hechos; no existió coordinación efectiva entre las diferentes áreas de Fiscalía, Coordinación de Puestos de Socorro, Dirección de la Unidad de Investigación de Homicidios Dolosos, Dirección de Hechos de Sangre, Tránsito y Transporte Público, así como la Fiscalía Regional, con la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas.
En algunos casos, de la comparativa de la ficha decadactilar con el sistema AFIS, se obtuvieron datos positivos de otras entidades federativas del país; sin embargo, los agentes del MP no solicitaron la colaboración de las Fiscalías o Procuradurías de esos estados para la localización de sus familiares; se presentaron cambios frecuentes de agentes del Ministerio Público investigador o del personal de la policía investigadora que indaga los asuntos y en los casos de personas que fueron identificadas por sus familiares, no hubo diligencias previas a la contingencia para la localización de familiares.
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En los puntos dirigidos al Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses se encuentra: por la dilación en la práctica de algunos dictámenes de huellas dactilares, no se pudieron tomar huellas a las personas fallecidas no identificadas y no reclamadas, debido al avanzado estado de descomposición en el que se encontraban al momento de la práctica; una cantidad considerable de los dictámenes de ADN se practicaron dilatoriamente y se documentaron hasta que se dio a conocer públicamente la contingencia.
Respecto a los dictámenes de genética que se solicitaron de las personas fallecidas sin identificar y personas fallecidas no reclamadas, el IJCF en la mayoría de los casos sólo ha documentado la toma de muestra o el perfil genético, pero no la confronta.
La Comisión Estatal de Derechos Humanos pide a las autoridades realizar un análisis cualitativo y cuantitativo sobre el trabajo que efectúan las áreas de la Fiscalía del Estado que investigan los delitos que influyen en el ingreso de personas fallecidas al Semefo, así como de las áreas del IJCF que tienen bajo su responsabilidad la emisión de dictámenes para la identificación de personas fallecidas.
Que se conforme de manera inmediata un equipo de trabajo con personal de alto nivel y con poder de decisión para que de forma específica atienda las inconsistencias documentadas en la recomendación relacionadas con las Personas Fallecidas sin Identificar, con el objetivo de que las personas inhumadas no queden en el olvido y que sean identificadas y entregadas a sus familiares, así como para que dé seguimiento al cumplimiento de esa recomendación y a la 10/2019, también por la CEDHJ, debiendo remitir informes periódicos que acrediten el avance en el debido cumplimiento.
SRN