Javier Duarte presuntamente creó un mecanismo para financiar su campaña como diputado federal y posteriormente como gobernador, cuando se desempeñó como titular de la Secretaría de Finanzas y Planeación de Veracruz durante la gestión de Fidel Herrera.
Lo anterior lo declaró Antonio Tarek Abdalá Saad, quien fue tesorero de Duarte y llegó a un acuerdo con la PGR para no ser juzgado en 43 causas penales por el presunto desvío de 55 mil millones de pesos que pertenecían a la Federación.
En los documentos a los que MILENIO tuvo acceso, se detalla que Tarek dijo que cuando él asumió como tesorero de la secretaría, el 6 de febrero de 2012, se pudo percatar “de la delicada situación financiera del estado”, como consecuencia de los manejos de los últimos años del gobierno de Fidel Herrera.
Tarek, quien era la persona de confianza de Karime Macías, esposa del ex gobernador detenido, relató que en 2004 Javier Duarte fue designado como subsecretario de Administración y Finanzas del estado y posteriormente titular de dicha secretaría durante el mandato de Herrera.
“Por lo que él (Duarte) conocía perfectamente y a detalle el funcionamiento, estructura, presiones y operación de la Secretaría de Finanzas, y fue en su periodo cuando la secretaría comenzó a utilizar cuentas concentradoras o licuadoras como mecanismo para financiar las pensionas políticas, económicas y de gobernabilidad que enfrentaba Veracruz”.
Antonio Tarek, quien se acogió a un criterio de oportunidad a cambio de declarar contra Duarte y coacusados, aseguró que el método que creó el ex gobernador se comenzó a usar desde 2008.
Recordó que en la cuenta pública consolidada de 2011 se había establecido que existía un ahorro neto del ejercicio de 2 mil 699 millones 141 mil 7 pesos, cuando en realidad había un déficit de unos 12 mil millones de pesos anuales.
“Este número es un aproximado, pues existían compromisos económicos mayores a los ingresos estatales por mil millones de pesos cada mes. De conformidad con instrucciones giradas por el propio gobernador, este déficit, no podía ser reflejado en la cuenta pública o en los estados financieros porque rompería acuerdos con bancos y covenants con acreedores de la bursatilización”, manifestó.
Para justificar la precaria situación económica del estado, en diciembre de 2011, “Duarte emitió un acuerdo” al titular de Finanzas para que determinara el pasivo “a que hubiera lugar”.
En un principio el acuerdo no se publicó en la Gaceta Oficial. Esto se hizo así, “porque el gobernador quería que los funcionarios de la Secretaría de Finanzas nos sintiéramos cómodos con la forma en que operaba la política económica del estado, pues según el mismo decía, era una forma de reconocer responsabilidad”, subrayó Tarek.