Resuelven caso de joven universitaria que desapareció hace 25 años

Kristin Smart desapareció en 1996 mientras caminaba a su casa después de una fiesta. Al fin se sabe qué le pasó y quién fue el culpable.

Kristin Smart, joven universitaria desaparecida en San Luis Obispo, California en 1996. (FBI vía AP)
California, Estados Unidos /

Kristin Smart era una estudiante universitaria de California de 19 años. Fue vista por última vez en 1996 después de asistir a una fiesta y desde entonces investigadores han trabajado incansablemente para descubrir qué le pasó. Este miércoles, 25 años después, las autoridades del condado de San Luis Obispo al fin tienen respuestas.

El Fiscal de Distrito Dan Dow, informó que Kristin Smart fue asesinada por un compañero estudiante durante un intento de violación la noche en que desapareció. El padre del sospechoso ayudó a esconder su cuerpo.

El culpable, Paul Flores, quien tenía 19 años en el momento del crimen, y su padre Ruben Flores fueron arrestados este martes. Paul, quien ahora tiene 44, enfrenta cargos por asesinato en primer grado y Ruben, de 80, por ser cómplice después de un asesinato.


¿QUÉ PASÓ?

Smart, originaria de Stockton, fue vista por última vez la noche del 25 de mayo de 1996 mientras regresaba a su dormitorio en el campus de San Luis Obispo de la universidad California Polytechnic State University después de una fiesta fuera del lugar. Se encontraba en estado de ebriedad en el momento y Flores, otro estudiante de primer año en la escuela, se ofreció a acompañarla caminando a su casa.

El asesinato sucedió en el dormitorio del joven, dijo Dow. Investigadores realizaron registraron la casa de su padre en Arroyo Grande y encontraron evidencia que apunta a que el cuerpo de la joven está enterrado en el jardín. Se están haciendo excavaciones para encontrarlo.


Dow agregó que en años más recientes Flores frecuentaba bares alrededor de su casa en el área de San Pedro de Los Ángeles y podría haber cometido otros ataques sexuales. Pidió reportar cualquier información que pueda estar relacionada con él.

Paul fue puesto bajo custodia en su vecindario de Los Ángeles. Permanece encerrado en la prisión de San Luis Obispo sin derecho a fianza. Ruben fue arrestado en su casa. También está en prisión, pero podría salir si paga una fianza de 250 mil dólares.

El abogado del primero se negó a hacer comentarios, mientras que el del segundo aseguró que su cliente es inocente.

¿CÓMO SE RESOLVIÓ EL CASO?

El alguacil de San Luis Obispo, Ian Parkinson, dijo que el podcast “Your Own Backyard” (“Tu Propio Patio” en español) ayudó presentando nuevos testigos, que fueron claves para concluir la investigación.

Desde que Parkinson llegó al puesto en 2011 reveló que tenía planes de descubrir y castigar a los culpables de la desaparición de Smart. Sus investigadores condujeron 137 entrevistas y obtuvieron 41 órdenes de cateo con las que se recolectaron 143 piezas de evidencia.


En 2016 evidencia señaló a Paul Flores como el principal sospechoso y en 2019 se entrevistó a nuevos testigos, cuyos testimonios ayudaron a que se aprobara una orden para intervenir y monitorear su teléfono celular.

En Febrero de 2020 los detectives del caso obtuvieron órdenes de registro para las casas de Paul Flores, su hermana, su madre y su padre. Las revisiones arrojaron evidencia física que llevó a una segunda búsqueda en la residencia de Paul en abril de ese mismo año.

En marzo de este 2021 se emitió una nueva orden para revisar la casa de Ruben Flores en Arroyo Grande. Ahí se encontró evidencia adicional que llevó a la resolución del caso.

¿QUÉ DIJO LA FAMILIA SMART?

Después del anuncio del alguacil, la familia emitió un conmovedor comunicado que en parte decía:

"Por más de veinticuatro años, hemos esperado este agridulce día. Es imposible expresar en palabras lo que este día significa para nuestra familia; oramos por que sea el primer paso para traer a nuestra hija a casa. Aunque el espíritu amoroso de Kristin siempre vivirá en nuestros corazones, nuestra vida sin sus abrazos, risas y sonrisas es un dolor de corazón que nunca se alivia. Saber que un padre y su hijo, a pesar de los desesperados llamados de ayuda, podrían haber mantenido este horrible secreto por casi 25 años, negándonos la oportunidad de poner nuestra hija a descansar, es un dolor incesante e imperdonable. Ahora ponemos nuestra fe en el sistema de justicia y seguimos adelante, consolados por saber que Kristin ha seguido en los corazones de muchos y no ha sido olvidada."

pmm


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